Dormir de manera efectiva y el tiempo recomendado durante la noche es importante para llevar una vida saludable. Sin embargo, muchas personas pueden encontrarlo como un verdadero desafío. En especial la gente mayor, ya que el envejecimiento altera los patrones de sueño. Sin embargo, existen trucos que puede aplicar para dormir mejor si tiene más de 50 años.
En primer lugar, hay que comprender que dormir bien es fundamental para el bienestar general. Es que, durante la etapa de sueño, el cuerpo lleva a cabo importantes procesos de reparación celular, que ayudan a fortalecer el sistema inmunológico y prevenir enfermedades. También mejora el funcionamiento cognitivo, la consolidación de la memoria y el manejo de las emociones. Por otro lado, la falta de sueño aumenta el riesgo de enfermedades cardiovasculares, diabetes, obesidad, depresión y ansiedad.
Los problemas para descansar por la noche se pueden incrementar con el paso de los años. Durante el envejecimiento, es común que haya cambios hormonales que repercuten en los patrones de sueño, lo que hace que se experimente dificultad para dormir, despertares repentinos en medio de la noche y una peor calidad del sueño profundo.
Eso genera un deterioro cognitivo, pérdida de masa muscular y un mayor riesgo de enfermedades crónicas, entre otras consecuencias. Sin embargo, existen algunos tips y consejos para dormir mejor si tiene más de 50 años.
Trucos que puede aplicar para dormir mejor si tiene más de 50 años
El doctor Óscar Larrosa Gonzalo, que forma parte de la Sociedad Española de Sueño, hizo una publicación en la revista Clara donde brindó una serie de trucos efectivos para dormir mejor si tiene más de 50 años.
- Evitar la vitamina C por la noche, es decir alimentos como el brócoli, coliflor y pimientos, así como también frutas cítricas como la naranja, el limón o el kiwi.
- Evitar alimentos con mucha grasa, calorías y azúcares, tales como las hamburguesas, los dulces y las frituras.
- después de las 6 p.m., así como tampoco la teína que está presente en el té.
- No consumir grandes cantidades de legumbres por la noche, ya que provocan gases y problemas digestivos.
- Evitar comer demasiado en la cena. Irse irse a acostar una vez que se realizó la digestión.