El cielo de una localidad de Suecia se iluminó en un espectáculo de color que asombró y generó malestar a los vecinos. Desde hace unas noches, los residentes de la ciudad de Trelleborg duermen bajo una impresionante luz púrpura que tiene una curiosa explicación.
No se trata de un nuevo fenómeno de la naturaleza ni de una clase de aurora boreal, tampoco de un milagro ni de un presagio del mal para suecia. El explosivo morado es provocado por una granja de tomates ubicada a diez minutos del lugar. Allí se instaló un sistema de iluminación led de bajo consumo que, además de convertir el cielo en púrpura, ayuda a que los tomates crezcan durante más tiempo.
Sin embargo, ni a los habitantes de Trelleborg ni tampoco a los de Gislov, localidad vecina, les complace el nuevo brillo artificial de sus noches, pues los molesta a la hora de dormir. Por el momento, se llegó a un acuerdo con la empresa para que las luces se apagaran por unas horas.
Un vocero de la compañía Alfred Pedersen & Son, propietaria de la granja, expresó a los medios locales: «Como primer paso, decidimos apagar todos los cultivos de tomates en las noches. Aunque será un retroceso para nosotros, no queremos enojar a la gente. Solo intentamos ahorrar electricidad y crecer».