Como si la frase “año nuevo, vida nueva” fuera de verdad, muchas personas deciden tomarse la Nochevieja como el momento ideal para poner en práctica rituales que los ayudarán para iniciar el comienzo del año con energía renovada. Ya sea comer uvas o estrenar ropa interior, el listado de creencias y tradiciones es variado.
Cada final de año y comienzo de otro representa un momento lleno de simbolismos en donde se le atribuye a los ritos el poder de transformar todo aquello que se quiera cambiar en la vida.
Estos son los rituales más conocidos de Año Nuevo y su significado:
Comer 12 uvas
Si bien es una tradición que tiene su raíz en España, no hay un consenso establecido respecto de su origen histórico. Las 12 uvas representan a los meses del año y cada una de ellas representa a su vez un deseo para el período entrante, aunque como es costumbre en este tipo de pedidos, no deben verbalizarse. Asimismo, el ritual tiene un desafío y es que las frutas deben ser consumidas en un minuto.
Usar ropa interior rosa
Vestir ropa interior color rosa es una tradición inspirada en la época victoriana. Por lo general, las bombachas se regalan en Navidad y se estrenan en la Nochevieja para recibir el año que entra. El color tiene el objetivo de atraer prosperidad y buena suerte.
Usar prendas o accesorios amarillos
En la antigüedad, el color amarillo recibió el valor de “nuevos comienzos” y, por su parecido al oro y al sol, fue relacionado con la riqueza, los cambios, la eternidad y la energía vital. Incluso, en algunas culturas también se lo vinculó a la fertilidad.
Debido a todo lo que representa el amarillo, muchos consideran que es un color ideal para usar o vestir en el cierre de 2022 y el comienzo de 2023. Con el objetivo de atraer la buena suerte, algunos depositan en los tonos dorados sus deseos, objetivos, desafíos y esperanzas, y lo consideran ideal para acompañar la cena de “Nochevieja”, despedir el ciclo que pasó y recibir con esperanzas y vibras positivas el año nuevo que está por comenzar.
Romper los platos
En Dinamarca y otros países nórdicos es costumbre romper la vajilla con la que se ha cenado estrellándola contra el suelo o la pared, en un intento por demostrar, como un deseo hacia el año entrante, que lo que se rompe se vuelve a unir.
Quemar un muñeco
Se trata de una costumbre extendida en países de Latinoamérica, como Ecuador, Colombia, Venezuela y Perú, es la quema de un muñeco, algo similar a lo que en la Argentina ocurre en el Carnaval.
En este caso, la figura es apodada “Año Viejo” o “El Viejo”, y su destrucción es parte de un ritual que busca comenzar de cero un nuevo año.
Saltar las siete olas
En lugares con salida al mar, como por ejemplo el Caribe y Brasil, se acostumbra meterse al océano y saltar siete olas, un número lleno de significados bienaventurados. En este caso, como recuerda la BBC, la tradición se remonta a las culturas de raíces africanas, porque el siete es un número espiritual en la religión umbanda.
Por eso, la fiesta se vincula con la diosa del mar Yemanjá, quien según esta tradición de Año Nuevo, da fuerzas para superar las dificultades.
Muchas veces, también va acompañada de ofrendas al mar, en donde se pide favores. Las personas ingresan al agua y arrojan ofrendas florales, como gladiolos blancos para pedir paz, rojos para el amor y amarillos para el dinero. Además, muchos tiran cartas con pedidos para la diosa del mar.
Vestir de blanco
Relacionado con la pureza y la renovación, muchas personas eligen vestir de blanco para absorber buenas vibraciones que les darán energía para todo el año entrante.