La regla número uno de la belleza es hidratar el rostro. Para tener una piel nutrida, lisa, sin manchas ni resequedad, es importante una rutina correcta de cuidado diario.
Los expertos aseguran que los ingredientes de la crema hidratante son igual de importantes que el método de aplicación para la eficacia completa del producto. Todo tiene un proceso y reglas a seguir.
Algunas claves para hidratar correctamente la piel son:
Elegir la crema hidratante adecuada
Hay que tomar en cuenta el tipo de piel que se tiene y sus necesidades en ese momento. Es importante acudir a un dermatólogo y pedir recomendación sobre el producto adecuado.
De lo contrario, solo se perderá tiempo y dinero con un producto que tal vez no es para el tipo de piel correcta.
Ordenar los productos
Es importante seguir un orden específico para que los productos funcionen a la perfección.
Antes de la crema humectante, se debe lavar bien el rostro. Así se eliminan residuos de grasa y maquillaje.
A continuación, se aplica el tónico. Su función es reestructurar el pH de la piel. Luego, el suero facial y el contorno de ojos. Cada una de estos es un producto diferente. Lo ideal es ir desde el más ligero hasta el más denso.
Finalmente, se hidrata el rostro con la crema facial.
Cómo aplicarla
Los expertos recomiendan aplicar los cosméticos con un pequeño masaje facial para mejorar su eficacia. Por ejemplo, para aplicar el suero, se necesita únicamente de tres a cuatro gotas en la palma de la mano. Se extiende por el rostro y cuello con las yemas de los dedos, simulando el efecto lluvia. Es decir, con ligeros golpes en forma de tres, que vaya desde la frente hasta la barbilla. Este movimiento ayuda a maximizar la penetración del producto en la piel.
Con la crema facial es algo similar, solo que en este caso se mantienen los dedos planos y unidos, con una presión suave que vaya desde dentro hacia fuera del rostro para mejorar la circulación sanguínea.
La cantidad
Con dos ligeros toques del dedo índice en el producto, es suficiente para rostro, cuello y escote. Así se evitará tapar poros y el molesto brillo en el rostro.