La aparición de arrugas, manchas, signos de expresión son señales que responden no solo al envejecimiento, como muchas personas creen. Estas imperfecciones de la piel pueden generarse debido a la práctica constante de malos hábitos.
La doctora Elaine Chang Crespo, especialista en medicina estética láser, señala que el proceso lento o acelerado del envejecimiento dependerá de diversos indicadores. Por ejemplo, el llevar una dieta adecuada o realizar ejercicio regularmente.
«El consumo del tabaco reduce la oxigenación cutánea. Por su parte, el alcohol la deshidrata, haciéndola lucir opaca», menciona la especialista.
A continuación, la doctora Chang señala cinco hábitos que las personas deberían olvidar si lo que buscan es retrasar el proceso de envejecimiento:
Dormir con maquillaje
Por la noche la piel regenera sus células y al permanecer cubierta con productos, los poros no respiran de manera correcta, lo cual genera además la aparición de acné.
Permanecer por mucho tiempo frente al celular
La luz producida por los teléfonos acelera la pigmentación y el proceso de oxidación de las células de la piel.
Beber alcohol en exceso
El consumo limita la producción de la vitamina A, responsable de mantener la flexibilidad y firmeza del rostro.
Mal manejo del estrés
La mejor manera de minimizar el estrés y, por lo tanto, el envejecimiento, es vivir de forma saludable, dormir bien y tener una rutina de trabajo agradable y adecuada.
Consumo excesivo de ciertos alimentos
El exceso de grasas, dulces y frituras repercute en la elasticidad y tonicidad de la piel, provocando la aparición de arrugas.