Un cazador furtivo de elefantes tendrá que cumplir con una condena de 30 años de trabajos forzados en Congo por su actividad depredadora. El hombre se dedicó a la caza de estos animales por años en uno de los parques nacionales del país. Así lo informó el martes 25 de agosto una organización no gubernamental.
Gerard Mombaza Mombembo, de 35 años de edad, nacido en la vecina República Democrática del Congo, era conocido como el «carnicero de Nouabale Ndoki». De ese modo lo conocían en la reserva natural donde operaba.
El sistema judicial del país lo declaró culpable de matar animales protegidos y por operar como un cazador ilegal de elefantes. Asimismo, se le imputó por uso de armas de rango militar por un tribunal de Ouesso, capital de la región de Sangha.
«Es una gran noticia en la batalla contra la caza furtiva y el tráfico ilegal de animales salvajes«, explicó Richard Malonga, jefe de WCS Congo, una ONG que trabaja en el parque de Nouabale Ndoki, creado en 1993.