En una decisión sorprendente pero profundamente reflexiva, el cofundador de Microsoft, Bill Gates, anunció que dejará 99% de su fortuna al considerar que sus hijos no necesitan «enormes sumas de riqueza».
Gates, reconocido filántropo y defensor de causas sociales, expresó que la utilidad del dinero radica en su capacidad para crear un impacto positivo en el mundo, y no en acumular riqueza personal.
«El dinero no me sirve de nada más allá de cierto punto. Su utilidad reside exclusivamente en crear una organización y dar recursos a los más pobres del mundo», expresaba Gates en una de sus citas más destacadas.
En la actualidad, Gates se ubica en el séptimo lugar entre los magnates más adinerados del mundo según Forbes.
A los 68 años de edad, su fortuna asciende a 124.500 millones de dólares, cifra asombrosa que no le brinda ningún tipo de satisfacción, a diferencia del tiempo compartido con su familia, amigos y de las acciones que generan un impacto social positivo, tal como ha expresado en entrevistas.
Esta postura justifica su decisión de legar menos de 1% de su patrimonio a cada uno de sus hijos.
“Nuestros hijos recibirán una gran educación y algo de dinero, así que nunca serán pobres, pero tendrán sus propias carreras”, expresó el magnate en una entrevista con el medio This Morning.
Desde su renuncia a la junta directiva de Microsoft en marzo de 2020, Gates canalizó sus esfuerzos hacia la filantropía, invirtiendo en proyectos educativos, iniciativas contra el cambio climático y promoción de la salud a escala global, también se transformó en uno de los principales dueños de extensas parcelas agrícolas en Estados Unidos.
¿Quién es el cuarto hijo?
Aunque Gates y su exesposa, Melinda French, decidieron legar solo una fracción mínima de su fortuna a sus tres hijos, Jennifer, Rory y Phoebe, tienen claro quién será el principal beneficiario de su legado: la Fundación Bill y Melinda Gates, que consideran su «cuarto hijo».
Melinda también asumió la responsabilidad de donar una parte significativa de su fortuna, que asciende a 10.600 millones de dólares de los 52.500 millones, según Forbes. Según ella misma expresó, le parecía «absurdo que tanta riqueza se concentre en las manos de una sola persona».
La Fundación Gates, dedicada a promover una vida sana y productiva para todos, recibirá 99% de la herencia de Gates.
Con planes ambiciosos para el futuro, la fundación pretende destinar 9.000 millones de dólares anuales a proyectos de innovación, incluidas la prevención de pandemias, la reducción de la mortalidad infantil y la mejora de la seguridad alimentaria.
Cada uno de los objetivos de la fundación ha sido objeto de críticas y escepticismo en cuanto a las verdaderas intenciones de sus miembros fundadores. Se cuestiona la gran influencia acumulada por la Fundación Gates, a pesar de que se presenta como una entidad apolítica.
Un ejemplo de esto es la notable importancia que la fundación tiene en la Organización Mundial de la Salud (OMS), que ocupa el puesto de segundo mayor donante, después del gobierno estadounidense.
La organización de los Gates sola es responsable de más de 88% del total donado por las fundaciones filantrópicas. Algunos también señalan otras razones por las cuales Gates opta por transferir su herencia a la fundación.
«Si destinara su patrimonio a sus descendientes, se enfrentaría a importantes impuestos de sucesión que se activarían tras su fallecimiento. Al hacer donaciones benéficas en forma de acciones, él y sus herederos podrían evitar estos impuestos. Al transferir casi la totalidad de su fortuna a organizaciones filantrópicas, multimillonarios como Gates están contribuyendo significativamente a la redistribución permanente de la riqueza», según un artículo publicado en The New Yorker.
¿Quiénes son los descendientes de Bill Gates y Melinda?
La mayor, Jennifer, completó el año pasado su maestría en salud pública en la Universidad de Columbia, donde recibió el premio a la Excelencia en Salud Pública General, tras haber estudiado biología en Stanford.
Está casada con el caballero egipcio Nayel Nassar, con quien tuvo una hija en 2023. Este ha sido uno de los mejores años para Gates, pues «se ha convertido en abuelo», como escribió en sus reflexiones del año pasado. El nacimiento de su nieta le ha llevado a reflexionar sobre el mundo que quiere dejar a su pequeña.
Rory, un joven «inteligente, educado y feminista», como lo describió con orgullo Melinda en una entrevista con Time, se graduó de la Universidad de Chicago con una «doble especialización y un máster», logrando estos títulos en solo cuatro años.
Phoebe Gates, suele acompañar a su padre en eventos benéficos, incluso pronunciando discursos. Es estudiante de Stanford y activista por los derechos reproductivos y la igualdad de género.
En octubre publicó una foto en París con su nuevo novio, el inversionista Arthur Donald, confirmando así su relación con el nieto del ex Beatle Paul McCartney.