La alimentación es una pieza fundamental en la vida del ser humano. Si se caracteriza por ser la adecuada, puede prevenir numerosas enfermedades y ayuda a mantener la memoria sana. De lo contrario, puede desencadenar diabetes, patologías cardiovasculares e, incluso, 13 tipos de cáncer o deterioro cognitivo.
En cuanto a los efectos que tienen los alimentos, un estudio hecho por investigadores de Columbia y Brigham and Women’s Hospital de Harvard establece que la dieta baja en un nutriente que se encuentra en frutas y verduras, conocido como flavonoides, provoca la pérdida de memoria relacionada con la edad.
De hecho, el estudio determinó que el consumo de esas sustancias podría beneficiar a adultos mayores de 60 años en el rendimiento de las pruebas realizadas. “La mejora entre los participantes del estudio con dietas bajas en flavonoides fue sustancial y plantea la posibilidad de usar dietas ricas en este nutriente o suplementos para mejorar la función cognitiva en adultos mayores”, dice Adam Brickman, profesor de neuropsicología en el Colegio de Médicos Vagelos de la Universidad de Columbia y colíder del estudio.
Lo anterior refuerza la idea de que el cerebro que está envejeciendo requiere nutrientes específicos para mantener su salud óptima, al igual que el cerebro que está en desarrollo.
“En este siglo, a medida que vivimos más, las investigaciones comienzan a revelar que se necesitan diferentes nutrientes para fortalecer nuestras mentes que envejecen. Nuestro estudio, que se basa en biomarcadores del consumo de flavonoides, puede ser utilizado como modelo por otros investigadores para identificar nutrientes necesarios adicionales”, explica Scott Small, autor principal del estudio y profesor de Neurología en la Universidad de Columbia.
La epicatequina, por ejemplo, es un tipo de flavonoide presente en diversos productos comestibles. Se cree que uno de sus efectos sobresalientes está relacionado con la elevación de los niveles de óxido nítrico en la sangre, que ayuda a relajar los vasos sanguíneos y mejorar su flujo. Las fuentes principales de la epicatequina se encuentran en blueberries, albaricoque, cerezas, vino tinto, té y chocolate negro.
El estudio, que se realizó durante más de 15 años, relacionó la pérdida de memoria con cambios en un área específica dentro del hipocampo del cerebro, una región que es vital para aprender y que se denomina circunvolución dentada. De hecho, otro de los hallazgos mostró que los flavanoides mejoran la función en esta zona del cerebro.