La presidenta de la Comunidad de Madrid Isabel Díaz Ayuso pone un plus a su carrera política con su acertado estilismo que evita la exuberancia y se inclina hacia una línea de atuendos que van acorde con su rol.
Y sobre ello, el diario El Debate recopiló una lista de cinco puntos que convierten el estilismo de Ayuso en un éxito a nivel político. Se presentan a continuación:
1. Parece de izquierdas pero es de derecha. En el momento en que el Partido Popular (de España) anunció a su candidata a la Presidencia de la Comunidad de Madrid, aparecieron fotos de Ayuso que, aunque lucía como una mujer agradable, su estilo se identificaba más con lo socialista. Lo que El Debate describe como «todo un acierto para ganar votantes».
2. Su peinado y maquillaje. Este aspecto tiende a ser algo más «casero» y raya en lo natural y neutro, un aspecto que resalta la cara angelical de Isabel Díaz. «Pero el hecho de que se note que se peine ella la hace más asequible al público general. Su peinado de melena rizada y corta la convierte en alguien más cercano al look de izquierdas que al de la típica política de derechas».
«Su maquillaje, a veces torpe, con la raya del ojo corrida o con labios excesivamente rojos, no hace más que reflejar la imagen de una mujer normal que como casi todas sus congéneres, hace lo que puede con la brocha y el lápiz khol», resalta el diario español.
Empatía con los votantes mediante su moda
3. Un estilismo corriente. El Debate describe como «acertadísimo desacierto» la combinación por parte de la Ayuso de pantalones negros con camisas blancas y blazers rojas, lo cual comparan con un estilo de azafata.
«Los pantalones apretados y las camisas no muy pulidas son otro síntoma de naturalidad, de una política excepcional que no tiene tiempo para estar planchando ni yendo de compras todo el día, ni para llevar una agenda con sus estilismos de a diario, ni siquiera para buscarse una estilista que la convierta en espectacular Cenicienta con príncipe», señalan.
4. Calzado poco sofisticado. Este es un aspecto con el que genera empatía y no críticas por parte de votantes: el uso de botas negras poco favorecedoras, zapatos aburridos y sandalias sencillas que no fomenta envidia. Este hecho la hace ver como una persona real, cercana y ocupada en sus obligaciones y no como una modelo de pasarela.
5. Adaptación al protocolo imperante. En sus eventos siempre muestra una vestimenta acorde, sin excesos, pero en los que destaca la elegancia y la comodidad.
En este sentido, El Debate afirma que el estilismo de Ayuso es una herramienta que usa para triunfar en las urnas electorales al transmitir seriedad, valentía y eficacia mediante su moda.
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