Los niños con deficiencia de hormona de crecimiento tienen como característica principal que crecen muy lento, a un ritmo menor a los cinco centímetros por año. Este trastorno de la hormona se puede notar en los primeros meses de vida, aunque es posible que no se detalle con claridad hasta los dos o tres años de edad, por lo que es importante que los padres busquen la ayuda de un pediatra al detectar alguna anomalía.Equilibrar los niveles de hormona del crecimiento, secretada naturalmente por la hipófisis, es esencial para que los niños presenten indicadores normales de estatura, fortaleza muscular y ósea, así como distribución de la grasa corporal. Dicha sustancia ayuda a controlar el nivel de glucosa y lípidos del cuerpo. Sin tratamiento, una persona puede retardar su desarrollo físico durante la pubertad y llegar a la adultez midiendo alrededor de 1.50 metros.El déficit de hormona del crecimiento puede estar presente al nacer o como resultado de alguna afección posterior. Es importante señalar que dicha alteración hormonal no afecta la inteligencia y que cada niño experimenta los síntomas de manera diferente.Estiramiento en dos tiemposEl infante en el primer año de vida presenta un crecimiento extraordinariamente rápido. De acuerdo con la especialista en endocrinología pediátrica, María Milagros Rodríguez, un niño debe crecer 25 centímetros al cabo de los primeros 12 meses, de los cuales el primer trimestre es el más relevante.Pero ese ritmo no continúa durante toda la niñez. En condiciones normales, en el segundo año el bebé crece 12 cm y posteriormente en forma relativamente constante, 6 cm por año, para finalmente presentar otro pico de crecimiento durante la pubertad, cuando se pueden alcanzar en un periodo de cuatro años alrededor de 23 a 25 centímetros, dependiendo del sexo.Se debe tener en cuenta que no todos los niños crecen a igual velocidad o consiguen la misma altura. Esto depende del potencial genético heredado de sus padres y factores ambientales. Hay muchas patologías que también afectan el crecimiento óptimo, es por eso que la evaluación del especialista en pediatría se hace considerando los diferentes problemas. La galena explicó que para poder identificar una falla en el crecimiento de un infante lo más importante es realizar una buena historia clínica y un examen físico completo: donde se incluye peso y talla, se sacan velocidades de crecimiento y se llevan a unas gráficas llamadas percentiles.El percentil es el indicador clínico comúnmente usado para determinar los patrones de crecimiento de niños, determinando la posición de la medida de un individuo. El indicador nombrado percentil 50, corresponde al registro medio, por encima de esta cifra están los percentiles 75, 90 y 97; por debajo 25, 10 y 3.A largo plazoSi se determina que hay talla baja debido a la deficiencia de hormona de crecimiento, el endocrinólogo indicará un tratamiento que implica reponer la sustancia faltante en el organismo a través de inyecciones. Esta terapia suele durar varios años y el niño debe ser visto regularmente por el médico, para evaluar el funcionamiento y realizar cambios a la dosis si lo considera necesario.Cuanto antes se realice el tratamiento de la afección, mayor será la probabilidad de que el niño crezca hasta alcanzar una estatura adulta cercana a lo normal. La mayoría de los casos de déficit de hormona de crecimiento no se pueden prevenir, es por ello que se recomienda a los padres revisar junto con su pediatra la estatura de su hijo en cada consulta y asistir a un especialista en endocrinología pediátrica en caso de dudas. Información: Nota de Prensa