En un ambiente de tranquilidad con el dólar, aumentando discrecionalmente las tarifas de los servicios públicos y sumando meses de superávit fiscal, la inflación en Argentina volvió a mostrar desaceleración y fue de 2,7% en octubre.
No se trata solo de la variación más baja en lo que va del año en el país, sino que para encontrar una menor hay que remontarse a tres años atrás.
El alza de precios había sido en septiembre de 3,5%, por lo que el número conocido hoy muestra una fuerte ralentización inflacionaria. En la línea cronológica hay que irse en los datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec) hasta noviembre de 2021 (+2,5%) para hallar cifras similares a la que se registraron en octubre.
En lo que va del año, la inflación avanzó 107%, por encima ya de la pauta esperada para este año por el proyecto de presupuesto 2025. En la comparación con los últimos doce meses, los precios avanzaron 193% y dejaron atrás el dos por delante (había sido de 209% en septiembre pasado).
La inflación núcleo fue de 2,9%, por encima del nivel general, lo que muestra que hay una inercia significativa que es neutralizada en parte por alzas por debajo de precios regulados o estacionales. Había sido de 3,3% en septiembre.
La división de mayor aumento en el mes fue vivienda, agua, electricidad, gas y otros combustibles (5,4%) por las subidas en alquiler de la vivienda y gastos conexos; electricidad, gas y otros combustibles; y suministro de agua, seguida de prendas de vestir y calzado (4,4%). Le siguen restaurantes y hoteles, con 4,3%. Los alimentos solo subieron 1,2%. Es la menor alza de los alimentos desde junio de 2020, en plena pandemia, cuando el gobierno pasado congeló todos los precios.
La desaceleración fue levemente mayor a lo que esperaban los análisis. El Relevamiento de Expectativas del Mercado (REM) del Banco Central (BCRA) había estimado avance de 3%. Para el año, se espera 120%.
Se trata de una variación mayor que la de 104,4% estimada por el Ministerio de Economía para cerrar este año en el proyecto de presupuesto 2025, pero menor que la de 211,4% que dejaron Alberto Fernández y Cristina Kirchner (la más elevada desde 1990) en 2023.