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Los desgarradores relatos de dos tías de los hermanos Menéndez: «Ningún niño debería tener que soportar lo que Erik y Lyle sufrieron»

por Avatar GDA | El Tiempo | Colombia

El caso de Erik y Lyle Menéndez regresó a los tribunales el pasado lunes, cuando se llevó a cabo una audiencia para revisar el estado de su petición de hábeas corpus. Según ABC News en esta ocasión, los hermanos escucharon el procedimiento por teléfono debido a problemas técnicos que retrasaron la conexión por videollamada.

Lo más destacado de la audiencia fue el testimonio de dos de sus tías: Joan VanderMolen, hermana de Kitty Menéndez, y Terry Baralt, hermana de José Menéndez. Ambas presentaron relatos sobre los abusos que los hermanos habrían sufrido a manos de su padre y pidieron clemencia al juez Michael Jesic.

Joan VanderMolen, tía de Erik y Lyle Menéndez, habla con los medios de comunicación después de una audiencia sobre si se debe reconsiderar la condena por asesinato en primer grado de Lyle y Erik Menéndez en Los Ángeles, California, EE UU, 25 de noviembre de 2024. Foto:EFE

 

«Ningún niño debería tener que soportar lo que Erik y Lyle sufrieron a manos de su padre», afirmó VanderMolen, quien cumplirá 93 años esta semana. La tía describió el dolor de saber que los hermanos vivían con el temor constante de ser abusados por su padre y lamentó la inacción de Kitty Menéndez al respecto.

Por su parte, Baralt, de 85 años, enfatizó que los hermanos se han rehabilitado durante los 35 años que llevan en prisión y pidió indulgencia al tribunal.

El caso Menéndez, que comenzó en 1989 con el asesinato de José y Kitty Menéndez, ha tomado un nuevo giro tras la presentación de dos evidencias clave. Una de ellas es una carta escrita por Erik Menéndez ocho meses antes de los crímenes, en la que relataba los presuntos abusos de su padre, y la otra, el testimonio de un exintegrante de la banda Menudo que acusa a José Menéndez de abuso sexual.

 

Diane Hernández, la sobrina de Kitty Menéndez, llega al juzgado de Van Nuys West. Foto EFE

 

Además de la petición de hábeas corpus, los hermanos tienen otros dos caminos hacia la libertad: una solicitud de clemencia presentada al gobernador de California, Gavin Newsom, y una recomendación de nueva sentencia hecha por la fiscalía del condado de Los Ángeles.

Sin embargo, la decisión final está en manos del nuevo fiscal de distrito, Nathan Hochman, quien asumirá el cargo en diciembre y ha prometido revisar minuciosamente el caso.

Juicio aplazado hasta el 2025

La audiencia del caso Menéndez, presidida por el juez Michael Jesic, fue aplazada para finales de enero debido a la complejidad de las pruebas presentadas. Foto Redes Sociales / X

El juez Michael Jesic reprogramó la próxima audiencia para el 30 y 31 de enero de 2024, argumentando que necesita tiempo para revisar 17 cajas de archivos sobre el caso.

Además, la decisión fue tomada para permitir que el recién elegido fiscal de distrito de Los Ángeles, Nathan Hochman, quien asumirá el cargo el 2 de diciembre, tenga tiempo suficiente para familiarizarse con los extensos registros del caso y presentar una posición informada.

La resolución del caso ahora está en manos de la justicia, con varios caminos abiertos para que los hermanos busquen su libertad.

Según Efe al juzgado del 25 de noviembre acudieron familiares, periodistas y 16 personas que fueron seleccionadas a través de una lotería en la que alrededor de 70 asistentes se jugaron una entrada con la intención de enterarse del caso y poder ver las caras de Lyle y Erik tras más de tres décadas en prisión.

Después de 35 años de prisión, los hermanos recobraron la atención pública debido a la exitosa serie de Netflix Monstruos: La historia de Lyle y Erik Menéndez, a la que se sumó un documental y el revuelo de una nueva generación que mira con otros ojos a los que antes fueron vistos como asesinos despiadados.