La actriz Lori Loughlin, recordada por su rol de Rebecca Donaldson en Tres por tres (Full House), se declaró inocente en el escándalo de sobornos para conseguir ingreso a universidades.
En documentos presentados en la corte, la artista y su esposo, el diseñador de modas Mossimo Giannulli, dijeron que renunciaban a su derecho a comparecer en la corte para una lectura de cargos y se declaraban no culpables, de acuerdo al sistema de justicia en EE UU.
La pareja y más de una docena de otros padres acaudalados (también hay figuras prominentes de las leyes, las finanzas, la moda, la industria alimenticia y otros campos) fueron imputados la semana pasada de cargos de fraude postal y asociación ilícita para lavado de dinero.
Lori Loughlin y Massimo Giannulli están acusados de pagar 500.000 dólares en sobornos para que sus dos hijas fueran admitidas a la Universidad del Sur de California como miembros del equipo de remo, aun cuando ninguna de ellas practica este deporte.
No se han pronunciado públicamente sobre las acusaciones. La primera y única aparición de la actriz tras estallar el escándalo fue el 4 de abril durante una sesión de su juicio en Boston, Massachusetts.
Otros varios padres acusados también se declararon inocentes.
La actriz Felicity Huffman y 12 padres más, en cambio, acordaron declararse culpables.
Algunos de los padres acusados de pagar sobornos para que sus hijos ingresen a universidades prestigiosas podrían recibir sentencias breves tras las rejas, de ser hallados culpables, para enviar un mensaje de que la gente privilegiada no está por encima de la ley, dicen algunos expertos. Pero otros pronostican que la mayoría, si no todos, recibirán libertad condicional y una multa, particularmente si aceptan su responsabilidad y cooperan.
Los padres están acusados de asociación ilícita para cometer fraude postal y privación de servicios postales honestos a terceros, un cargo que conlleva hasta 20 años en prisión, aunque los acusados, en especial aquellos sin antecedentes penales, normalmente reciben mucho menos que eso.
Los abogados de algunos de los padres probablemente estén negociando acuerdos con los fiscales, dicen expertos. las autoridades tienen la influencia suficiente para presionarlos a declararse culpables; caso contrario enfrentarán más cargos, como evasión fiscal o lavado de dinero.