Con el mismo método con el cual hace 20 años clonaron a la oveja “Dolly”, científicos chinos lograron clonar por primera vez a una pareja de monos. Pese a que sobrevivieron sólo 50 días, los científicos lo catalogaron como un avance.
Para Claudio Hertz, ingeniero en Biotecnología Molecular de la Universidad de Chile, la clonación de estas especies ataca un punto importante. “La idea que tienen es poder usar esto para tratar de modelar enfermedades”.
“Las especies más usadas en ciencias son los roedores, los ratones han sido capaces de solucionar un problema bien importante, que es recapitular lo que le pasa a un humano, sobretodo en condiciones complejas como el Alzheimer, donde los circuitos neuronales no son idénticos entre el humano y el ratón. Entonces el mono es mucho más cercano”, agregó el director alterno del Instituto de Neurociencia Biomédica.
“Uno puede introducirle fallas genéticas observadas en humanos para tratar de recapitular enfermedades complejas, que no tienen cura en estos momentos”, indicó Hetz en una entrevista con Emol.
Advirtió que “la condición principal es que se usen monos sólo cuando es la única solución”.
El científico chileno que se encuentra estudiando enfermedades genéticas como el Alzheimer, ELA y Parkinson. Explicó que “cuando estudiamos Alzheimer en ratones, los ratones no desarrollan una patología tan cercana a los humanos, algo falta. En ese sentido yo veo harta esperanza para estas enfermedades complejas”.
Clonación de humanos
Para los científicos asiáticos, la clonación de macacos cangrejeros puede estar justificada éticamente, pero no en seres humanos. Como señalaron en un comunicado que “la no investigación futura en humanos depende que los científicos se atengan a unos estrictos estándares éticos”.
Claudio Hetz manifestó que “cualquier laboratorio que trabaje en esto podría hacerlo, el impedimento es ético”.
El experto chileno reconoció que en términos metodológicos, el clonar a la oveja Dolly no tiene mucha diferencia a clonar un humano.