En Venezuela las madres festejan su día el segundo domingo de mayo. Es un reconocimiento especial al honor que tiene la mujer que ha gestado, a la que entrega su vida para hacer feliz a su hijo y también a la que con esmero siembra valores para toda la vida.
Madres del espectáculo venezolano quisieron compartir sus experiencias y cómo viven este día.
Valeria Valle: el mundo se detuvo
La animadora Valeria Valle compartió con sus seguidores en redes sociales cada paso de su gestación y ahora lo feliz que se siente por la llegada de Sofía del Valle, quien ya cumplió su primer mes.
«Es increíble ser madre. Al ver a mi hija por primera vez el mundo se detuvo para darme cuenta de que ya tenía el más puro amor en mis brazos. No se compara con nada de lo que he vivido. Es un amor inmediato. Tenemos la creencia de que vamos a enseñarles el mundo y son ellos los que nos hacen descubrir cosas maravillosas».
La pequeña ha sido una de las bebes más esperadas. Apenas Valle anunció que estaba embarazada y que su padre era el político Henrique Capriles Radonski, la expectativa fue mayor. Este día, que será el primero de muchos, la modelo lo celebrará junto con su madre y su hija. Agradece el apoyo incondicional de su mamá y valora cada detalle que ha tenido con ella en sus 31 años de vida.
«Apenas termine la cuarentena quiero que Sofi pueda conocer a nuestros familiares que están lejos, y a nuestros amigos más cercanos. Es algo en lo que pienso todos los días.Quiero llevarla a la playa, al Ávila, a la Virgen Del Valle para agradecerle que es una nenita sana. Tengo miles de planes con ella».
Karina: amor a millón
Yasha Marcella y Xander son los hijos de Karina, una de las grandes voces de la escena musical de la década de los años 80 y 90, que reside en Miami.
«El día que nació mi primera hija me transformó en un ser más íntegro, conocí el verdadero amor incondicional, el sacrificio real del ser. Con mi segundo hijo se rompieron todas y cada una de mis convicciones y de mis prejuicios, me convertí en la mujer más flexible. Ambos han sido los capitanes de mi barco desde ese día. Mis vivencias con ellos son las más importantes, aleccionadoras y felices de mi mundo. Me han poseído desde el instante en que nacieron».
A Karina le encanta viajar y experimentar aventuras extremas con sus hijos. Escalar montañas, lanzarse en tirolina, esquiar y pasear en cruceros. La artista confesó que son sus momentos más preciados. Se considera una madre activa y participativa de todo.
Este tiempo de pandemia ha cambiado algunos planes y percepciones, por eso este año la celebración tiene otro tono.
«Simplemente quiero estar con ellos, no pretendo espectacularidades. Yo divido mitad del tiempo de Xander con mi ex esposo y mi hija mayor vive en Orlando, donde va al college, así que ya tenerlos a ambos conmigo me hace infinitamente feliz. Es una alegría profunda e inexplicable verlos con sus personalidades distintas y tan independientes. Sus formas de expresarse y relacionarse son tan diferentes a las mías y entre sí. Son extremadamente graciosos y ocurrentes, me río demasiado con ellos. Mi vida es un reality».
Sabrina Seara: el motor de la vida
Para la actriz Sabrina Seara ser madre es el papel más maravilloso de su vida. Maximiliano vino a cambiar su mundo y lo llenó de mucha felicidad. Tiene una carrera en la televisión y mil compromisos profesionales que comparte con su familia y se organiza muy bien para ser una mamá 4×4.
«Siempre me habían dicho que era una experiencia muy bonita, pero ahora que lo vivo sé que nada se compara al amor que un hijo te puede dar. Maximiliano es la fuerza y el motor para levantarme cada mañana y dar lo mejor de mí. Quiero que mi hijo tenga el ejemplo de mujer trabajadora que lucha por sus sueños».
Maximiliano vive sus 3 años a toda máquina. Es todo energía, dice su madre, con un espíritu imparable. Disfrutan mucho las actividades al aire libre.
«Este año celebraremos el Día de las Madres en casita. Con toda esta situación del covid-19 no podremos salir, pero hemos aprendido durante esta pandemia que lo más importante es estar juntos con salud. El resto no nos hace falta».
Sandra Villanueva: la mejor creación
La actriz y presentadora Sandra Villanueva tiene a un cómplice en esta cuarentena, su hijo Antonio, que demuestra a través de las redes sociales que le encanta el trabajo de su mamá y tiene muchas actitudes para el mundo de la televisión.
«Ser madre ha sido lo mejor de mi vida. Antonio no solo es mi hijo, es un compañerito de vida, mi cómplice en travesuras, juegos, e incluso en el trabajo, pues le gusta tanto lo que hago que se involucra y opina. Me llena de amor cada día. No sabía que una persona te podía querer y admirar tanto. Eso me da la tranquilidad: saber que lo estoy haciendo bien. Ser mamá le dio sentido a muchas cosas e hizo que me dejaran de importar otras. El mayor aprendizaje de la maternidad: la paciencia, don que no tenía y renunciar al ego».
Antonio es muy extrovertido y comparte todo con su madre. «Nos gusta conversar, me cuenta y pregunta todo sin miedo ni reparo. Me encanta porque sabe que siempre le contesto con la verdad y sé que seré no solo su madre, sino su amiga».
La artista planea una comida en casa con una mesa bien servida y quiere compartir con algunas personas de su familia. El Día de las Madres no pasará por debajo de la mesa.
Shirley Varnagy: maestros y cómplices
La periodista Shirley Varnagy es una de las madres que comparte su espacio laboral con sus hijos. Noah la acompañó en la radio como comentarista durante el pasado Mundial de Fútbol y Naomi, ahora en casa, la asiste en el programa.
«El mayor aprendizaje ha sido que los trabajos y proyectos van y vienen, puedo salir de un estudio de televisión y entrar a otro, pero ellos siempre me esperan en algo que no es fugaz: el hogar».
La presentadora comparte con su hija Naomi las rutinas femeninas y con su hijo Noah se viste de futbolista para practicar penales.
«Dios me dio la bendición de tener un niño y una niña, con gustos y exigencias diferentes. También descubrí que Noah tiene una relación solvente con la cámara y los micrófonos, así que jugamos a armar nuestro propio programa, compartimos la pasión por comunicar. A los tres nos gusta la música, el baile, la playa y un buen chocolate».
Para Shirley Varnagy lo primordial es celebrar este día con sus hijos en casa y gozar de salud. Son las bendiciones de su vida. «En años anteriores mi esposo ayudaba a mis hijos a preparar el desayuno festivo. Este Día de las Madres en cuarentena les toca triple trabajo: desayuno, almuerzo y cena en casa. Verlos sanos y felices es la mayor celebración para una madre, más en una coyuntura como la que vivimos globalmente».