Deus Ex Machina es un recurso que se emplea para resolver el conflicto en un montaje teatral. Su uso se remonta al teatro clásico griego y hace alusión a un actor que, en su papel de dios, entra en escena desde una grúa y pone fin a la historia.
Rosanna Hernández, Elvis Chaveinte y Gabriel Agüero decidieron nombrar así su compañía. “Buscamos un término que nos vinculara con lo teatral. Es bueno que la gente se pregunte sobre ese nombre tan particular. Generar interrogantes es uno de los objetivos que perseguimos como grupo”, explica Agüero.
Cada uno de los fundadores viene de una escuela diferente. Rosanna es abogada, Elvis es técnico automotriz y Gabriel es licenciado en Artes. Si bien esas son sus profesiones, su pasión es otra: el teatro. Tal interés en común fue la base para la creación de la compañía. “Tuvimos la inquietud de hacer el trabajo nosotros mismos. Un día nos reunimos y decidimos darle forma al proyecto. Hemos plasmado sobre el escenario nuestras inquietudes”, comenta Chaveinte, quien se inclina no solo por la actuación, sino por la dramaturgia. Con Deus Ex Machina ha presentado dos piezas de su autoría: Trece Rosas y La Crema y Nata.
Este año cumplen su quinto aniversario. Si bien firmaron la constitución del grupo en 2008, no fue sino hasta 2013 cuando presentaron su primera obra, Saverio, el cruel. Cinco años pasaron hasta poder materializar finalmente sus propósitos. “Somos un equipo itinerante, ese es el gran dilema. Nuestra intención es tener un lugar propio para ensayar y guardar la escenografía. Después de una gran inversión, esos materiales terminan regados por todas partes y es mucho lo que se pierde”, señala Hernández.
A pesar de los obstáculos que afronta cualquier grupo, son muchos los que aún apuestan por la creación artística desde las tablas. “Pretendemos hacer un teatro no complaciente. Hemos montado textos contemporáneos, tanto de venezolanos como de extranjeros, con gente joven que comparte con nosotros esa mística de trabajo. No hemos permitido que la situación del país merme la calidad de cada montaje”, coinciden los tres sobre los pros de mantener su propia compañía.
El reportorio de obras también incluye La cocinera, Emilia, Mi hijo camina (un poco) más lento, Niños lindos, Un fausto por la avenida, Madame Pythie y Abrázame así, estas dos últimas presentadas en Microteatro Venezuela. Con algunas de ellas obtuvieron el apoyo de embajadas, pero para las restantes buscaron otras formas de financiamiento. “Es muy difícil llevar a cabo un proyecto como nosotros lo planteamos. Ahora bien, es una gran ventaja contar con un equipo increíble. Siempre buscamos la manera de que su labor sea retribuida económicamente. En nuestro caso la ganancia es netamente artística”, agrega Hernández.
Los tres son artistas integrales del teatro: producen, escriben, actúan, dirigen. Los roles dentro de la agrupación se distribuyen naturalmente. Los intereses individuales entran en sintonía con el criterio de los otros integrantes y entre todos hacen el esfuerzo para montar cada una de las piezas. Uno de los grandes retos ha sido la difusión de su trabajo, pero gracias a las redes sociales (@TDeusExMachina) han logrado captar muchos más espectadores.
El año pasado decidieron retirarse del Festival de Teatro de Caracas, después de que Fundarte utilizara, en la publicidad del evento, el hashtag #AlGuaireLoQueEsDelGuaire, en alusión a la escena dantesca en la que los manifestantes se vieron obligados a lanzarse al río para evitar ser reprimidos por los cuerpos de seguridad. Confirmaron que de haber otra invitación de parte de esta institución no participarían. “No entendemos cómo pueden traer a una compañía extranjera y a las venezolanas se les paga cuatro lochas”, denuncia Hernández.
El tema de la migración también es una constante en sus próximos planes. Agüero pasó una temporada en el exterior y se encuentra momentáneamente en el país. A pesar de la distancia, mantuvieron firmes sus actividades. “La idea de que uno sale y deja a la familia y los amigos es bastante ruda, pero me ha hecho entender la agrupación desde otra perspectiva. Quiero que nuestras obras sean llevadas al interior del país que también tiene la necesidad de asistir al teatro”, confiesa Agüero.
Tebas Land, el más reciente montaje de la compañía, fue la obra escogida para celebrar sus cinco años de trabajo. Original del escritor uruguayo Sergio Blanco, es la primera vez que se presenta en Venezuela. Aborda inquietudes fundamentales para los integrantes de la compañía: el proceso de creación del artista, la relación entre el director y el actor, y la ficcionalización de una historia real sobre las tablas.
Tebas Land
Espacio Plural, Trasnocho Cultural
Viernes, 5:00 pm
Sábado y domingo, 4:00 pm
Entrada: Bs 70
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