En abril de 2018, Millie Bobby Brown, actriz principal de Stranger Things, se convirtió en la persona más joven en ser incluida en la lista de las 100 personalidades más influyentes, que elabora cada año la revista Time.
Esta semana se lanzó a través de Twitter una campaña para desprestigiar a la joven. Bajo la etiqueta «TakeDownMillieBobbyBrown» («Derribar a Millie Bobby Brown»), cientos de usuarios compartieron en línea imágenes de la actriz con consignas homofóbicas y racistas.
Las imágenes apuntaban a dañar su honra, dejándola como una persona despreciable, que despotrica contra los homosexuales y la religión musulmana, principalmente.
Numerosos usuarios participaron del boicot a la intérprete de «Eleven», librando un acoso virtual de proporciones similares al que le hicieron hace pocas semanas a la actriz de Star Wars, Kelly Marie Tran, a quien le publicaron una oleada de comentarios racistas y sexistas, por los que finalmente eliminó todo el contenido de su Instagram.
Millie Bobby Brown finalmente decidió suspender su perfil en Twitter, el que se encuentra todavía inactivo. Sin embargo, conservó su cuenta paralela @Milliestopshate, precisamente dedicada a erradicar el bullying. La joven actriz aún no ha hecho ninguna declaración pública respecto al tema.