TEATRO

«Duelista», una comedia de capa y espada, con romance, galanteo y picardía

por El Nacional El Nacional

Escrita y dirigida por Federico Pacanins, la historia expone la vida de José Gil Fortoul,  abogado, escritor, sociólogo e historiador, uno de los principales voceros del positivismo en Venezuela. El personaje principal es  interpretado por José Tomás Angola para brindarnos el retrato de una generación de intelectuales de comienzos del siglo XX.

Romance, galanteo  y picardía criolla

Duelista, una obra concebida, inicialmente, para   Cayito Aponte, como un homenaje a su larga carrera artística y para su lucimiento;  nos muestra   un  recorrido por la vida de Gil Fortoul,  pero también  nos descubre una Venezuela, una forma de ser, una sociedad, un tiempo, que  tal  como  lo describe Mariano Picón Salas, en Suma de Venezuela, era “esa curiosa mezcla de costumbres francesas y españolas que se superpuso al misterio y azar de nuestra vida criolla y marcó el tono social de la pequeña metrópoli entre los últimos años del siglo XIX y los primeros lustros del siglo XX”. Era la Caracas donde las mujeres se vestían con los modelos de la “Compañía Francesa”.

A Gil Fortoul lo visitan apariciones de su memoria, como el padre Carlos Borges, sacerdote de vida disipada y sensual, poeta y orador incendiario, personificado por Salvador Pérez Castro. O “Lola”, suerte de símbolo en donde  el autor resume todos los amores y las musas del sabio,  papel que representa  Valentina Garrido. De su cotidianidad está “Candelaria”, idealización del femenino caraqueño de entonces,  encarnado por Sandra Yajure.

Duelista ofrece historia, música, romance, melopeas, galanteo, picardía criolla… ¡un duelo de espadachines en escena!… y, sobre todo, la atmósfera y el retrato de una generación de intelectuales de comienzos del siglo XX, capaz de vivir con cierta graciosa plenitud a pesar de encarar circunstancias no del todo favorecedoras.

La caricatura de Gil Fortoul, con su pipa, monóculo, flor en el hojal,  sus manos en el bolsillo, y pliegues, elaborada por Ninón (Nina Crespo Báez, a quien   se le reconoce la innovación de haber realizado caricaturas de cuerpo entero, en las que daba énfasis a las actitudes, ropas y contorno;  considerada en la década de los años 30 del siglo pasado,  como enfant gaté de los círculos intelectuales caraqueños.  En 1932, un jurado integrado por  José Gil Fortoul, Carlos Otero y Federico Brandt,  le concedió una de las cuatro medallas de oro, en el II Salón de Humoristas Venezolanos, que se había inaugurado a finales de 1931 en el Ateneo de Caracas);  convertida en la imagen  de Duelista,  nos  anticipa  una  comedia que  expone libremente rasgos biográficos de Gil Fortuol, (cuya  acción transcurre  en el baño de su casa,   la mañana  del 15 de junio de 1943, justo antes de su muerte);  representante de una generación venezolana signada  por  el positivismo, con marcado acento en un paradójico romanticismo  (“las paradojas son las únicas verdades”, decía George Bernard Shaw) y hasta de cierto “gomecismo ilustrado”.

Aparte de llamar  la atención sobre  la esgrima,  deporte de combate que atenúa y dignifica la controversia  y que muestra el camino del episodio de su real duelo con Enrique Gómez Carrillo (cronista guatemalteco hábil en el manejo de la espada), como algo crucial.   Gil Fortoul,  publicó un trabajo sobre la esgrima moderna.  Por ello la obra cuenta con  la presencia activa de dos deportistas de la esgrima en la escena, para representar a Gil Fortuol y a Gómez Carrillo en sus años de jóvenes duelistas.

Los espectadores se remontarán al  tiempo  en el que  el francesismo caraqueño de la época predominaba, entre otras cosas,  en trajes y perfumes,  así  como  en la literatura de la generación de El Cojo Ilustrado.

Un bon vivant, como lo fue José Gil Fortoul,  que lucía  bisoñé y monóculo, fumaba  pipa y  hablaba  con un especial acento que lo lleva a afrancesar las “r”.  Acento que trajo al regresar de su largo periplo por Europa,  que no perdió en toda su vida, y que fue motivo de burla por muchos.  Cuando falleció, en 1943, preparaba el tercer tomo de su Historia Constitucional de Venezuela.

Ficha  técnica y artística

Sandra Yajure,  (“Candelaria”); Salvador Pérez Castro, (“Padre Carlos Borges”);  Valentina Garrido, (“Lola”);   Raquel Zapata y Fernando Javier Carrero,  y José Tomás Angola como José Gil Fortoul.  Vestuarios de Fabiola Neri.  Escenografía de Freddy Belisario.  Video Mapping de José Martínez y José Tomás Angola.  Dirección Musical de Sandra Yajure.  Grabaciones de Albert Hernández.  Iluminación de Manuel Troconis.  Sonido de Ángel Fernández.  Producción general de Carlos Silva.  Asistencia de dirección de Yessica Serrano.  Canciones originales, libreto y dirección escénica de Federico Pacanins

                              

Duelista

Sábado y domingo, 11:00 a.m.

Teatro de la Asociación Cultural Humboldt,

San Bernardino

Con información de Nota de Prensa