ENTRETENIMIENTO

Teatro Alberto de Paz y Mateos: 50 años entre desalojos y promesas

por Avatar EL NACIONAL WEB

El Teatro Alberto de Paz y Mateos cumple 50 años con la misma infraestructura con la que se inauguró. El recinto ha acogido a diversos grupos artísticos en sus 1.555 metros cuadrados y ha sido testigo del desalojo de equipos de artistas por motivos políticos. Este año, entes gubernamentales celebran las cinco décadas de trayectoria del centro cultural más grande de la urbanización Las Palmas; sin embargo, en el discurso oficial son escasas las referencias a los talentos que comenzaron a forjar una cultura de las tablas caraqueñas allí y que trabajaron por el mantenimiento de la institución desde 1992 hasta 2010.

Voceros del Instituto de las Artes Escénicas y Musicales, ente adscrito al Ministerio de la Cultura, ofrecieron una rueda de prensa para presentar la programación del aniversario. A la reunión asistieron Nicolás Curiel, Charles Arias, Antonio Cuevas, Maigualida Gamero y Xiomara Moreno.

En el encuentro se relató la historia del teatro, que comenzó con el giro hacia el modernismo que dio el productor teatral Alberto de Paz y Mateos, quien falleció el 29 de noviembre de 1967, día que se designó para la inauguración del teatro. Sin embargo, poco se habló de la presencia por casi 20 años de diversas agrupaciones que mantuvieron ese centro cultural en pie e hicieron grandes aportes a la cultura.

Desalojo gubernamental

El Alberto de Paz y Mateos se edificó por un aporte de la Corporación Andina de Fomento en 1967. En 1990 la gerencia del teatro comenzó a ser gestionada por el Consejo Nacional de la Cultura y dos años después fue cedido a través de un comodato a la agrupación teatral Theja, que se mantiene creando en otra sede bajo la dirección de José Simón Escalona. En mayo de 2008, por ordenanza gubernamental, se suprimió el Conac y se liquidó el contrato que avalaba la presencia de diversos grupos artísticos dentro del Teatro Alberto de Paz y Mateos.

En agosto de 2009, los directores de compañías como Theja y el Ballet Contemporáneo de Caracas conocieron la noticia de que el Ministerio de Cultura había decidido excluirlas del Convenio de Cooperación Cultural. “No se financiarán a colectivos e individualidades cuyas conductas públicas perniciosas afecten la estabilidad psicológica y emocional colectiva de la población, haciendo uso de un lenguaje ofensivo, descalificativo, mintiendo y manipulando”, decía el acta.

En 2010 todas las agrupaciones entre las que estaban también Fundafolk, Macrodanza, Caracas Roja Laboratorio y la Escuela Nacional de Danza fueron desalojadas del recinto.

“Yo pasé 20 años reconstruyendo ese teatro y nos lo arrebataron de las manos. De verdad prefiero no hablar del tema, pero todo el que me conoce sabe lo que significó para mí”, dijo el director José Simón Escalona y aseguró que hasta el momento se siente afectado por la forma en la que su agrupación y otras se quedaron sin la sede que tanto ayudaron a mantener en pie.

El director actual del Teatro Alberto de Paz y Mateos, Charles Arias, fue consultado por los hechos que involucraron el desalojo de las agrupaciones. “Si se trae un conflicto personal, que no tiene nada que ver con la infraestructura, y se le agrega el punto de vista político, difícilmente se podrá llevar a cabo un proceso. El recinto fue víctima de una barrera que afectó a los proyectos, pero las puertas se mantienen abiertas”, aseguró.

Promesas

Arias fue el encargado de presentar la programación que durante este mes de septiembre celebra los 50 años de vida del teatro que cuenta con salones de danza, un aforo de 190 butacas y una torre administrativa de 3 pisos. Dentro de los anuncios se incluye la inauguración de la Biblioteca José Gabriel Núñez para la que el dramaturgo donará su archivo personal de textos.

También hay promesas a largo plazo. “Estamos haciendo un trabajo de restauración de los espacios de la torre administrativa con el objetivo de acondicionarlos como residencias para que el talento del interior del país pueda venir”, indicó Arias.

El director del teatro aseguró que el recinto se ha mantenido con la autogestión, sin embargo precisó que el financiamiento privado ya no es suficiente. “Estamos en una época difícil y lo que percibimos por alquileres de espacios o taquilla no cubre las necesidades”. También señaló que se están levantando informes especializados para conseguir financiamiento con el fin de mejorar la infraestructura del teatro, que se mantiene igual desde hace cinco décadas. “La tramoya y el techo del teatro ya cumplieron un ciclo. Estamos trabajando en pro de lograr esos cambios importantes, porque todo lo que tiene el teatro se ha conservado igual desde su origen”, refirió el director y agregó que los planes están enmarcados dentro de propuestas que serán presentadas ante la ministra de Cultura Alejandrina Reyes, para lograr el establecimiento de un presupuesto anual para la institución.

Un año de gestión

Este mes, Charles Arias cumple un año a la cabeza de la institución. Antes fue director general de producción del Instituto de Artes Escénicas y Musicales y ahora ocupa la Dirección de Teatro y Circo del mismo IAEM, ente adscrito al Ministerio de la Cultura; además, también es director general del Teatro Alberto de Paz y Mateos. Arias es egresado de la Escuela de Artes de la UCV y del Taller Nacional de Formación del Rajatabla, donde estudió con los maestros en los que ahora se apoya para impulsar proyectos artísticos en el recinto. Este mes se llevarán a cabo talleres de formación en dramaturgia, iluminación y actuación. Habrá conversatorios con Román Chalbaud, Nicolás Curiel y Armando Gota. Y el 29 de septiembre, a las 6:00 pm, se presentará la ópera Libreta de California, basada en un texto de José Balza y dirigida por Miguel Issa.