Con 28 años de edad, la actriz Shailene Woodley es una de las estrellas más importantes de su generación. En su carrera se lució en películas de pequeño presupuesto como The Spectacular Now, protagonizó una franquicia con la saga Divergente y obtuvo los elogios de la crítica al protagonizar las dos temporadas de la serie Big Little Lies, junto con actrices consagradas como Nicole Kidman o Meryl Streep. Pero su camino no fue nada fácil. Según reveló recientemente en una entrevista, una etapa de su carrera estuvo marcada por un problema de salud que casi la lleva a alejarse de las pantallas.
En diálogo con el New York Times, Shailene abrió la puerta a una etapa de su vida que jamás había hecho pública. Si bien prefirió omitir detalles, la intérprete se animó a conversar sobre ese momento tan difícil. «Jamás hablé mucho de esto en los medios, y algún día lo haré, pero durante mis veinte años estuve realmente muy enferma. Mientras trabajaba en la saga Divergente y me entregaba totalmente a mi labor, me encontraba también lidiando con un problema muy profundo, una situación física que me atemorizaba. Y debido a eso debí decirle que no a muchas oportunidades, porque ante todo necesitaba recuperarme. Y muchos de esos trabajos terminaron en manos de colegas por las que tengo un gran cariño».
Según recuerda la actriz, esos años fueron muy difíciles y realmente llegaron a poner en jaque su carrera. «Había una mezcla de gente diciéndome ‘no tendrías que haber renunciado a ese trabajo’ o ‘no tendrías que estar enferma’. Y todo eso se juntaba con mi proceso personal. Estaba en una situación en la que no tuve más opción que renunciar a mi carrera, y eso derivó en una voz negativa en mi mente que me persiguió durante años», recordó Woodley.
Finalmente Woodley pudo superar ese problema de salud y con éxito siguió adelante con su camino como actriz. «Durante los últimos años trabajé mucho en mi salud mental, un proceso que es lento. Pero, gracias a ese esfuerzo, me siento muy asentada con respecto a quién soy y todo en mi vida me resulta muy claro. Me siento muy agradecida de haber atravesado esa línea de fuego, porque ahora ya sé hacia dónde no quiero volver», expresó.