Luego de haber triunfado en los Oscar, Bafta y Goya, este domingo fue la industria iberoamericana de cine la que encumbró a Roma, del mexicano Alfonso Cuarón, con cinco Premios Platino, incluidos los de Mejor Película y Mejor Director.
Todo hacía presagiar que esta sería otra noche dulce para la película mexicana, pues partía como gran favorita con nueve nominaciones y no defraudó al obtener cinco estatuillas en la VI edición de los Platino del cine iberoamericano, celebrada en la Riviera Maya por segundo año consecutivo.
Además de ser considerada la Mejor Película Iberoamericana del año y de reconocer la labor de Cuarón como Mejor Director, el filme consiguió también los Platino a Mejor Guión, Mejor Dirección de Fotografía y Mejor Dirección de Sonido.
Sin embargo, ni Yalitza Aparicio ni Marina de Tavira, ambas nominadas a Mejor Actriz por su trabajo en Roma, ganaron la estatuilla, que fue a parar a manos de la paraguaya Ana Brun por su participación en Las herederas.
Brun, que estaba retirada de los escenarios, ganó por esta película el Oso de Plata a la Mejor Actriz en la Berlinale y le ha supuesto un salto al estrellato después de una trayectoria centrada, sobre todo, en el teatro. Esta película, dirigida por Marcelo Martinessi, relata la historia de dos mujeres descendientes de familias adineradas que comienzan a perder su fortuna y se ven envueltas en un fraude. Al recoger la estatuilla, la paraguaya dedicó el galardón a los actores y productores de su país que trabajan “con pocos recursos pero con mucho talento”.
España también dejó una profunda huella en esta edición de los Platino con el premio a Mejor Actor adjudicado a Antonio de la Torre, protagonista de El reino, y a la Mejor Serie de Televisión, que fue para Arde Madrid, de Paco León y Anna R. Costa, un trabajo que se impuso a La casa de las flores.
México sí consiguió las estatuillas a mejores interpretaciones de teleserie, que fueron para Diego Luna, por Narcos: México, y para Cecilia Suárez, por La casa de las flores, que también era la presentadora de la gala junto al español Santiago Segura.
El filme Campeones, reconocido con un Goya a Mejor Película este año, ganó el Premio Platino Educación en Valores por abordar las discapacidades intelectuales; con el galardón de Mejor Documental fue reconocida la producción española El silencio de los otros, sobre la lucha por la justicia de las víctimas del franquismo.
La Mejor Película de Animación recayó en la española Un día más con vida, dirigida por Raúl de la Fuente, y los premios a la Mejor Música Original y Dirección de Montaje fueron para las también españolas Yuli y El reino.
Uno de los momentos más emotivos de la noche fue cuando el actor mexicano Tenoch Huerta emocionó a Yalitza Aparicio al ofrecerle una dalia como muestra de su admiración. Acto seguido, ambos actores pidieron que los asistentes se dieran la mano en alto como símbolo de compañerismo entre los hombres y las mujeres involucrados en el mundo del cine.
El tono habitual de la gala fue el humor, con chistes encorsetados del español Santiago Segura para un evento que se mantuvo más alejado de las reivindicaciones políticas que en años anteriores. Solo el incombustible Raphael, ganador del Premio Platino de Honor por su trayectoria artística desde los años sesenta, logró poner de pie al público con su mítico “Yo soy aquel” para convertir el evento en su “gran noche”.
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