El tenor español Plácido Domingo aseguró este jueves a Efe, en medio de las acusaciones de acoso sexual, que está muy contento porque está trabajando y en contacto con el público tras dar un concierto en Moscú.
“¿Mi estado de ánimo? Me ha visto que estoy muy contento porque estoy trabajando y eso es lo más importante. Estoy cantando y en contacto con el público”, comentó al término de su actuación en el Crocus City Hall de la capital rusa.
Estas fueron las primeras declaraciones del artista a la prensa después de un concierto desde que fuera acusado de acoso sexual por una veintena de mujeres. Los supuestos hechos, que habrían ocurrido en los años ochenta, le obligaron a dejar la dirección de la Ópera de Los Ángeles.
“Sigo trabajando, no he dejado de trabajar y voy a todas partes y eso es lo mejor”, añadió, acompañado en todo momento de su hijo, Plácido Domingo Jr.
Adelantó que volverá en abril a Rusia, donde debutó en 1974 con la compañía de La Scala. Cantará en el legendario Teatro Bolshói, como hiciera hace 45 años.
Ovacionado en Rusia
“El público ruso es extraordinario”, subrayó.
El tenor recibió este jueves el apoyo y el cariño de los rusos. Este fue su segundo concierto europeo desde que dejara sus cargos de responsabilidad en Estados Unidos.
Domingo fue recibido con aplausos y despedido con bravos en un auditorio que se encuentra en uno de los centros comerciales más exclusivos de la capital rusa.
Ante más de 6.000 enfervorizados aficionados a la ópera, el artista español comenzó con dos arias de Umberto Giordano y Giuseppe Verdi. Siguió con un dúo junto a la mezzosoprano rusa María Katáeva con música de Amadeus Mozart.
También compartió escenario con Oxana Shílova, una de las estrellas del teatro Mariinski de San Petersburgo, y con un viejo amigo, el director de orquesta Yuri Bashmet.
Como es tradición, Domingo también reservó sus energías para interpretar varias zarzuelas como “El dúo de la africana” de Manuel Fernández Caballero o “Maravilla” de Federico Torroba.
Y también puso en pie a los asistentes con el bolero “Sabor a mí” del mexicano Alvaro Carrillo y un tema más moderno, “Perhaps Love”, compuesto por el tenor y John Denver.
El punto culminante de la noche fue cuando cantó a dúo con su hijo, quien se mostró muy cariñoso con su padre, al que dio un beso en pleno escenario.
La velada terminó con la interpretación de “Bésame mucho”, uno de sus temas preferidos, y “Atardeceres de Moscú”, la clásica canción rusa que cantó en su idioma original.
El público ruso le inundó con ramos de flores al final de la actuación, que se prolongó durante casi tres horas.
La fanaticada
Los presentes en la sala, que acogió en 2013 el festival de Miss Universo presidido entonces por el actual presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pagaron por una entrada entre 4.000 y 60.000 rublos (50-850 euros, 55-945 dólares).
“Estoy al tanto de las acusaciones, pero mientras no se presenten pruebas convincentes… no tengo nada que decir. Mientras, me dedicaré a disfrutar del arte”, comentó a Efe Lika, una espectadora, minutos antes del inicio de la función.
Su acompañante, Malika, destacó que el artista español tiene un don divino y que la primera vez que lo escuchó en directo lloró como una niña.
Mientras, Natasha fue aún más tajante: “No me interesan las acusaciones. Plácido es tan bueno que lo demás no me importa”.
Domingo, que se presentó el martes con un padre de familia en su primera rueda de prensa desde el estallido del escándalo sexual en agosto, estuvo acompañado en todo momento por su esposa, Marta Ornelas, y su hijo.
El español recordaba estos días que actuó por vez primera en este país en 1974 y la última durante el pasado Mundial de fútbol celebrado en Rusia en 2018.
Después de que se cancelaran todas sus actuaciones en suelo norteamericano, Domingo acudirá en las próximas semanas a Hamburgo, Colonia, Valencia y Milán.
Y es que Domingo, fiel a su credo de que si no trabaja se oxida, tiene acordada una veintena de conciertos en Europa hasta finales de 2020.