ENTRETENIMIENTO

Oswaldo Vigas: 100 años del maestro del modernismo latinoamericano

por El Nacional El Nacional

El 4 de agosto se conmemora el centenario del nacimiento de Oswaldo Vigas, uno de los artistas más influyentes y originales de América Latina. Su obra, que abarca más de seis décadas de creación, se ha expuesto en importantes museos e instituciones del mundo y ha sido reconocida por su singularidad y fuerza expresiva.

Para celebrar su legado, se han organizado diversos eventos y publicaciones que ponen en valor su aporte al arte contemporáneo. Entre ellos se destaca la presentación del catálogo razonado de su obra lanzado en Nueva York, la exposición en el Museo de Arte Moderno de la Ciudad de México (MAM), que lo relaciona con otros grandes maestros continentales como Wifredo Lam, Rufino Tamayo, Roberto Matta, Joaquín Torres-García y Francisco Toledo, y la representación en Asia a través de la Galería Kwai Fung Hin de Hong Kong, que comenzará en diciembre un ambicioso plan en todo el territorio asiático, con exhibiciones en museos e instituciones a lo largo de la región.

Además, la Fundación Oswaldo Vigas, presidida por su hijo Lorenzo Vigas y dirigida por Dilia Hernández, prepara dos libros con textos de renombrados críticos internacionales que profundizan en el análisis y la comprensión de su obra. Lorenzo Vigas explicó que “a pesar de que mi padre no estuvo interesado en la promoción de su obra, nunca dudó sobre la trascendencia de su legado”.

Mientras que Axel Stein, quien fue director del departamento de arte Latinoamericano de Sotheby’s, considera que gracias al trabajo de la Fundación Oswaldo Vigas el artista está “regresando con la cabeza muy en alto de una ausencia injustificada, de un exilio al que fuera relegado por haber tomado Vigas y otros artistas figurativos una ruta de corte humanista y espiritual en momentos en que las corrientes cinéticas y la abstracción en general se convertían en el arte oficial venezolano”.

Ave y personaje, 1977 | Cortesía Fundación Oswaldo Vigas

Vigas siempre reclamó para sí un sentido de pertenencia a una historia, a una geografía que demandan de los creadores nuevas interpretaciones y descubrimientos”, agregó.

Lorenzo Vigas afirmó que la obra de su padre buscó a través de la pintura “el origen de la creación, allí donde animales, minerales y vegetales coexistían en armonía. Ese momento que todos llevamos por dentro y que nos une independientemente de nuestro credo u origen”.

La obra de Vigas forma parte de numerosas instituciones, incluyendo el Museo de Bellas Artes, Houston; el Museo de Arte Moderno de San Francisco; el Museo de Arte de la Universidad Estatal de Michigan; el Museo de Arte de las Américas, OEA, en Washington, D.C.; la Colección Avon, en Nueva York; en Francia: en el Musée Jean Lurçat et de la Tapisserie Contemporaine, Angers, Musée Des Beaux Arts D’Angers y Musée Des Beaux Arts, en Reims; en Colombia: Museo de Arte Moderno y Museo de Arte Contemporáneo El Minuto de Dios; en Perú: Museo de Arte Contemporáneo, en Lima; en Chile: Museo Nacional de Bellas Artes; en Uruguay: Museo Ralli en Punta del Este, y en numerosas e importantes colecciones privadas en todo el mundo.

En el año de su centenario, Oswaldo Vigas sigue siendo una figura relevante y vigente del arte latinoamericano, cuya obra continúa sorprendiendo y cautivando a nuevas generaciones de espectadores.