La emotiva producción musical “Ojalá estuviera allá” ha logrado conmover a la diáspora venezolana y a quienes sienten un vínculo especial con las tradiciones del país sudamericano. Este ambicioso proyecto audiovisual reúne a más de 100 músicos y cantantes venezolanos radicados en Madrid, creando un “Parrandón Sinfónico” que fusiona lo clásico con lo popular.
El corazón del proyecto está en su repertorio cuidadosamente seleccionado, que recorre icónicas canciones venezolanas con un enfoque sinfónico. Entre las interpretaciones destacan:
- “Al mundo Paz” (Joy to the World): un símbolo de esperanza y unión universal.
- “Faltan 5 pa’ las 12”: un clásico de la Navidad venezolana que evoca la importancia de la familia.
- “Niño lindo” y “El niño criollo”: piezas que resaltan la ternura de la infancia y la identidad nacional.
- “Espléndida Noche” y “Sentir Zuliano”: homenajes a la alegría de compartir y al orgullo regional, respectivamente.
Además, el tributo a Billo Frómeta con “Aguinaldo con Billo” celebra a uno de los íconos de la música venezolana. Mientras que el resto del repertorio invita a recordar las raíces culturales y familiares de quienes están lejos.
Henry Querales, director del proyecto, describió la iniciativa como un esfuerzo para usar la música como un lenguaje universal capaz de unir corazones en cualquier parte del mundo. “Con este proyecto buscamos unir a los venezolanos a través de nuestra música y nuestra cultura”, señaló.
“Ojalá estuviera allá” no es solo un tributo musical, sino un llamado a la reflexión sobre la identidad venezolana y el significado de comunidad. Esta obra invita a la unidad, a la nostalgia y, sobre todo, a la esperanza, recordando que, a través del arte, es posible mantener vivas las tradiciones y conectar con el hogar, incluso desde la distancia.