Netflix cuenta ahora con 230,75 millones de abonados, superando con creces sus previsiones y las expectativas del mercado para el último trimestre, y pasando página a un 2022 difícil para el servicio de streaming, según un comunicado de resultados publicado el jueves.
La plataforma también anunció que su fundador, Reed Hastings, cedía su puesto de codirector ejecutivo a Greg Peters, junto a Ted Sarandos.
«Estoy muy orgulloso de nuestros primeros 25 años, y muy ilusionado por los próximos 25», dijo Reed Hastings, que originalmente creó un servicio de alquiler de DVD por correo. Permanecerá en la empresa como «presidente ejecutivo».
Netflix sufrió un bajón el año pasado. El servicio perdió casi 1,2 millones de abonados en el primer semestre.
Netflix sigue «bajo una fuerte presión»
Empezó a atraer nuevamente a millones en el tercer trimestre, y luego ganó 7,66 millones de nuevos abonados entre octubre y diciembre, mucho más de lo esperado.
La plataforma se benefició de las nuevas temporadas de series de éxito como The Crown, sobre la familia real británica, y Emily in Paris, pero también de nuevos programas, como la serie documental Harry & Meghan y la popular serie Wednesday.
Pero Netflix sigue «bajo una fuerte presión para corregir el rumbo y hacer mejores resultados para sus accionistas», señaló Paul Verna, analista de Insider intelligence, después de que «sus acciones perdieran más del 50% de su valor en 2022».
En el cuarto trimestre, la empresa californiana ingresó 7.850 millones de dólares, pero solo generó 55 millones de beneficio neto, muy por debajo de los 257 millones esperados por el mercado.
Netflix tomó medidas el año pasado para generar nuevas fuentes de ingresos, que deberían dar sus frutos este año.
En concreto, la plataforma lanzó en noviembre una nueva suscripción, más barata y con publicidad, una alternativa menos glamurosa que había rechazado durante mucho tiempo.
«Este es el principio de un punto de inflexión para la empresa», afirmó Verna. «Esperamos un comienzo relativamente débil, con unos ingresos publicitarios de 830 millones de dólares en 2023».
«Porque Netflix, al igual que otras empresas de streaming, se enfrenta a una fuerte competencia, a vientos económicos en contra y a la urgente necesidad de centrarse en la rentabilidad más que en el crecimiento de las suscripciones», explicó.