Su energía exploradora a la hora de crear canciones que desbordan los límites de los géneros musicales hace que este joven artista siga ganando reconocimiento tanto dentro como fuera del país. Este año, Noreh llega con una potencia revitalizada; con una exploración personal profunda que le sirve de inspiración constante para crear canciones y una disposición a compartir sus inesperadas indagaciones entre la música, la rima y la poesía.
En conversación con El Nacional, cuenta cómo fue fiel a su palabra al adentrarse en una nueva era creativa. Con temas que mantienen su esencia, pero llevados a sonidos más actuales que se conecten con el público. Canciones como sus dos nuevos singles, “Dios y el Diablo” y “2.0”, que lanzó junto a Jeeiph, que formarán parte de su primer disco.
Noreh: portada de su EP, Dios y el Diablo.
Proceso de transformación
Para Noreh, este 2022 se trata de cimentar nuevas realidades y adoptarlas como suyas. Explica que todo proceso de transformación, por corto o largo que sea, es importante para lograr objetivos y trazarse propósitos: el suyo, hacer buena música.
“Esta evolución me la enseñó mi año debut como artista”, señaló. “Ya pasé esta etapa por la cual estuve trabajando durante 11 años. Fue muy interesante y pasaron cosas increíbles como giras, los premios Pepsi Music y el reconocimiento de la gente”, destacó. “Sin embargo, ahora es donde realmente empieza el trabajo”.
Fotos: Ramsés Romero
Se refiere al hecho de dejar de ser un prospecto a ser un artista completo con un trabajo estable y constante; que tiene la identidad suficiente como para que las personas sepan cuál es su voz, su música, qué cosas escribe y cómo.
“Para eso tuve que hacer un recuento de mis influencias folclóricas, en este momento estoy en eso: estudiando todo lo que en algún momento interpreté, escribí y creé”, explicó. “Estoy trabajando en un primer disco que sea fiel justamente a eso, pues solamente así es que puedo construir mi tan ansiada identidad”.
Noreh no es un «debut»
Noreh aún no se atreve a decir que lo conocen en todo el país, pero eso no quiere decir que no esté trabajando por cambiar esa realidad.
“Es un trabajo de hormiguita, pero todos hemos hecho una labor formidable para dar a conocer mi música”, dijo. “Todo el equipo que le da vida a mi carrera está comprometido con ella, con hacerla significativa. Además, la música que construimos, creamos, hacemos y pensamos está hecha para todo el mundo y ahí está la fórmula que buscamos para que nos reconozcan”, añadió.
Noreh: Estoy trabajando en un primer disco que sea fiel a mis raíces; a lo que creo. Solamente así puedo construir mi tan ansiada identidad
Para Noreh, la realidad es que cada artista tiene metas y todas son diferentes. “Muchos desean el Grammy y otros sacar a su abuelita o a sus padres del barrio. Todas esas premisas son válidas y, al menos a mí, me llena de dicha y orgullo ser testigo de ello”, indicó. “Pero la mía es construir canciones que, más allá de la parte divertida, de la noche y del party, tengan mensajes profundos que resuenen con el día a día de cada quien y sus emociones; que la gente las valore y se sientan identificados”.
“He aprendido, últimamente, que el dinero y el reconocimiento son extras que generan tu éxito. Yo prefiero decir: soy de ustedes; compartir con la gente que me sigue, darles música, reírnos, estar tristes, enojados y, sobre todo, enamorados. El ser humano suele ser lo más contradictorio del mundo y no existe ciencia que pueda definir el porqué de nuestras acciones… Ahí está el centro de mi inspiración”, manifestó.
Todo vale; todo suma
“Cada cosa que vives y observas te trae ideas que te llevan a mil caminos. El trabajo del escritor, o del artista, es desarrollar un color que otorgue particularidad y así se pueda transportar a la gente de distintas formas a un lugar al que solo él puede”, afirmó.
A pesar de considerarse un artista nuevo aún, resalta que esa década en donde le dedicó su vida a estudiar para ser quien es hoy día fue lo que le permitió valorar hasta el más mínimo detalle de su recorrido por el mundo artístico antes de su debut.
“Para mí, la calle fue una escuela y yo la tuve toda la vida”, aseguró. “Eso es un aprendizaje invaluable porque cuando he hecho presentaciones en vivo y me encuentro con familias enteras, incluyendo a los abuelos, sentados escuchando mi música, es el claro ejemplo de que yo puedo ser considerado como un artista longevo… Y eso es lo que realmente busco; perdurar en el tiempo”.
Dos singles a la vez
Con Dios y el Diablo, Noreh quiso rescatar la idea de que el ser humano siempre tendrá dos bandos juzgando o dando consejos. Además, es su primera incursión en el sonido de la bachata, cosa que hace a esta canción mucho más especial.
“Nos hablan al oído, muy de cerca, todo el tiempo”, dijo. “La inclinación siempre va a estar más de un lado que de otro; en este caso, este tema habla de una relación. El protagonista como yo lo construyo se lleva el lado bueno; rescata las cosas malas, pero para evolucionar hacia la mejor versión de sí mismo”, aclaró.
Imagen de Archivo.
“Me emociona muchísimo incursionar en el mundo de la bachata y de la fusión tropical. Esta es una canción llena de contrastes no solo en el género, la letra y los colores musicales sino también porque me permite salir de mi zona de confort, hacer algo diferente a lo que ya venía presentando junto a mi equipo”, expresó.
Como hombre, el cantautor señaló que se tiene que haber vivido los dos lados, positivo y negativo, para saber cuál define al ser humano. “Es imposible que alguien haya pasado una vida completamente recta y decir que uno u otro no te llena. A veces pasa que uno cree estar tomando una decisión eterna y luego se equivoca; la experiencia se usa para eso. Es lo más valioso. Así te vuelves un analítico de las cosas que quieres para ti o que quieres cerca”, recalcó.
Con «2.0», tema interpretado junto a Jeeiph, se basa en la versión mejorada de alguien; en el progreso, evolución y prosperidad que se gana cuando alguien en tu vida te aporta grandes experiencias.
El disco perfecto
Tiene un año sacando a flote un catálogo variopinto de EP’s que contribuyen al reconocimiento de su estatus como artista y compositor. Sin embargo, nada se le compara a la creación de su primer compilatorio en forma de disco.
«Para mí estar trabajando en algo tan grande no tiene nombre. Es crecimiento puro; de hecho, estoy dándole ahora mismo un concepto interesante porque lo tenía casi listo hasta hace poco pero un día llegué, me detuve, puse la mente en blanco y lo borré», narró.
Fotos: Ramsés Romero
Hizo, sin más, borrón y cuenta nueva. «Fue de un segundo a otro. Así, comencé un disco completo de cero con la idea de que quiero que el material perdure en el tiempo y pueda ser escuchado 50 años después de lanzado», atajó. «Este disco, estoy seguro, saldrá mejor. De hecho, ya está siendo mejor pues está 100% basado en las primeras experiencias: primer amor, primer beso, primera vez, primer desamor, tristeza, cosas familiares… Todo va a tener que ver con la primera vez que nos pasa algo significativo», recalcó.
Noreh en 2023
Como artista, espera ansiosamente el estreno de su primer disco y que, más allá de la repercusión de los números, se convierta en una de estas piezas de estudio para la gente. «Quiero que se sorprendan y se pregunten por qué combiné cosas que no deberían combinarse y, además, me salió bien», destacó. «Deseo dejar huella siendo lo más transparente posible».
Como hombre, desea trabajar en sí mismo todos los días; entender cómo funciona una persona común y corriente sin tener un letrero en la frente que diga «artista».
«Tengo que vivir experiencias para poder escribir y conectarme; solo puedo entender a la gente a través de vivencias cotidianas. No puedo escribir o cantar algo de lo que no sé nada. Considero que el artista debería estar trabajando y enfocándose más en eso; en ser persona y entender todo lo que significa no verse inalcanzable o ser más que los demás. Es una meta constante», manifestó.
Mi salud mental es mi música; es mi catarsis. Desde los 12 años no había hecho más nada en mi vida… Estoy aprendiendo a hacer otras cosas, pero entendiendo que todo esto es parte de mí.
Noreh viene de trabajar junto a reconocidos productores como Tainy, Mr Naisgai, Dylan Fuentes, Alvarito Díaz y también junto a quien considera su mentor, Manu Lara, productor de Bad Bunny, Sebastián Yatra, entre otros, con los que pronto presentará nueva música. En su futuro próximo destaca, además, una colaboración bien interesante con Sin Bandera.
Pronto llevará a cabo una serie de conciertos en Venezuela. Para más información sobre Noreh, ingresar a su cuenta de Instagram.