El Museo de Bellas Artes de Montreal, Canadá, le dedica una exposición a la artista plástica venezolana Marisol Escobar, abierta al público desde el sábado 7 de octubre.
«¡Nuestros equipos trabajaron duro para traerles nuestra nueva gran exposición sobre una de las artistas más populares de su tiempo, Marisol! A partir del sábado 7 de octubre, venga a admirar sus notables esculturas de gran escala y muchas otras obras únicas y fascinantes», compartió la institución en su cuenta de Instagram.
La muestra, organizada por el Buffalo AKG Art Museum, presenta la retrospectiva más completa dedicada a la artista venezolana, musa de Andy Warhol.
Además de obras emblemáticas de los años 60 y 70 y otras posteriores, la exposición incluye bocetos, estudios y fotografías personales del artista para conocer más a profundidad sus métodos de trabajo y su vida.
La retrospectiva contará con una audioguía en la que los visitantes podrán escuchar comentarios y debates de especialistas –como Cathleen Chaffee, curadora en jefe del Museo de Arte AKG de Buffalo y curadora de la exposición– sobre el trabajo de Marisol.
La exposición estará acompañada de un catálogo publicado en francés e inglés por el Museo de Arte AKG de Buffalo, DelMonico Books y el Museo de Bellas Artes de Montreal (versión en francés) y que se podrá adquirir en la Boutique-Librería MMFA.
Nacida en París y de padres venezolanos, Marisol pasó su juventud entre Caracas, Nueva York y Los Ángeles. Se formó en la Académie Julian y en las Bellas Artes de París. A principio de la década de los años 50, se instaló definitivamente en Nueva York, donde estudió junto a Hans Hofmann y se dedicó a la escultura.
Sus primeras obras estuvieron fuertemente influenciadas por el expresionismo abstracto y el arte precolombino, que descubrió en exposiciones en Nueva York y en sus viajes a México.
La artista venezolana no solo es conocida por sus obras, sino también por el lugar que ocupa en el mundo del arte neoyorquino, donde conoció a Andy Warhol, quien la invitó a aparecer en varias de sus películas.
En 1968 representó a Venezuela en la Bienal de Venecia y fue una de las 4 mujeres (entre 149 artistas) seleccionadas para la exposición Documenta de Kassel. Hasta su muerte, en 2016, Marisol continuó esculpiendo mientras experimentaba con otras técnicas, como el dibujo, el grabado y la fotografía.