Su misión, si decide aceptarla, será… encontrar su equipaje. El actor estadounidense Tom Cruise fue víctima de un robo por varios miles de dólares en Birmingham, donde está rodando la séptima entrega de la serie Misión: Imposible.
El equipaje se encontraba dentro del auto de su guardaespaldas, que fue robado el lunes por la noche frente al hotel en el que se alojaba, informó el viernes el diario británico The Sun.
«Recibimos una denuncia de un BMW X7 robado en Church Street, Birmingham, en la madrugada del martes», confirmó un portavoz de la policía, sin confirmar la identidad del propietario.
«El coche fue encontrado poco después en Smethwick», añadió, y precisó que «la investigación continúa», gracias en particular a «las cámaras de videovigilancia en la zona donde se encontró el vehículo».
Sin embargo, «todo lo que había en su interior ha desaparecido», dijo una fuente a The Sun, refiriéndose a «parte del equipaje y las pertenencias del actor de 59 años de edad».
Según el rotativo, los ladrones escanearon y luego duplicaron la señal enviada por la llave de contacto del auto de lujo, todo ello a dos minutos de una comisaría. «La artimaña -digna de la serie de películas ‘Misión: Imposible‘- permitió a la banda huir con el coche en las narices del equipo de seguridad», afirmó el periódico.
La presencia de la estrella, conocido por hacer él mismo la mayoría de las escenas de riesgo en sus películas, causó un gran revuelo toda la semana en esta zona del norte de Inglaterra.
Se le vio rodando varias escenas para la séptima entrega de la franquicia Misión: Imposible, en la que interpreta al agente de Ethan Hunt, especialista en espionaje en condiciones extremas.