Dueña de un elegido bajo perfil, Michelle Williams solo suele mostrarse cuando es estrictamente necesario: en las entregas de premios y en algunos festivales. En esas situaciones, además, suele sorprender con discursos claros y comprometidos sobre los temas que más le preocupan.
Este domingo, en la alfombra roja de los Globos de Oro, Williams se mostró por primera vez embarazada, posando junto a su prometido, el productor Thomas Kail y, algunos minutos después, encendió a sus colegas con el mensaje más fuerte y sentido de la ceremonia.
La ex esposa de Heath Ledger -con quien concibió a Matilda, de 14 años de edad- resultó vencedora en la categoría Mejor Actriz de una Miniserie por su participación en Fosse/Verdon, donde interpreta a la bailarina de Broadway, Gwen Verdon. La serie de 8 capítulos, producida por Kail, retrata la compleja relación entre su personaje y el famoso coreógrafo Bob Fosse.
A propósito de su embarazo y del rol de las mujeres en Estados Unidos, Williams brindó un encendido discurso que resultó el más político y festejado de la ceremonia. «Cuando ponen en manos de alguien este premio, están reconociendo las decisiones que tomó como actor, que son producto de las opciones que tuvo como persona, de su educación, el entrenamiento y el tiempo invertido. Agradezco ese reconocimiento. Pero también estoy agradecida de vivir un momento en el que las opciones existen. Porque, a los cuerpos de mujeres y niñas pueden sucederles cosas que no son producto de sus decisiones«, comenzó diciendo.
Luego indicó: «Hago todo lo posible para vivir de acuerdo a mis elecciones y no ser víctima de una serie de eventos que simplemente suceden. Puedo retroceder, incluso a momentos difíciles, y reconocer mi letra por todas partes. A veces desordenada y garabateada, otras veces cuidadosa y precisa, pero es la letra que he tallado con mi propia mano. No habría podido hacer esto sin emplear mi derecho como mujer a elegir. Elegir cuándo tener hijos y con quién».
Después, instó a las mujeres a pensar su voto: «Todas las madres saben que las escalas giran en torno a nuestros hijos. Sé que mis decisiones pueden ser diferentes a las de ustedes, pero le agradezco a cualquiera que sea el Dios al que ustedes le rueguen por vivir en un país basado en la libertad de culto. Mujeres, cuando llegue el momento de votar, piensen en sus intereses; es lo que han estado haciendo los hombres durante años». En ese momento, comenzó a escucharse una ovación que la obligó a hacer una pausa.
«Es por eso que el mundo se parece a ellos. Pero no se olviden de que nosotras somos el colectivo más importante en cuanto a caudal de votos en los Estados Unidos. Hagamos que el país sea más un reflejo de nosotras«, finalizó Michelle Williams. Luego, una de las encargadas de entregarle el premio, la actriz mexicana Salma Hayek, cerró el momento con un grito: «¡Por el derecho de las mujeres a decidir!».