En Los Roques
Quedarse en apartamento
Casa Tramonto se llama esta magnífica opción en el Gran Roque que ofrece 3 apartamentos de una habitación con exquisita lencería, cama matrimonial y litera, un baño, cocina equipada con todo para 4 personas, lindo comedor, preciosos detalles en la decoración y servicio de limpieza. Las maravillosas damas de Aquarena se ocupan de lo que les haga falta a los huéspedes. Hay wifi y agua caliente. Pueden llevar su comida preparada o cocinan allá y se ahorran unos churupos.
Para ir: el Gran Roque. Calle La Lagunita.
Teléfonos: (0412) 278 2848 / (0414) 131 1282.
En la web: www.casa-tramonto.com / [email protected]
[email protected] / [email protected]
Twitter: @casatramonto
Facebook: Casa Tramonto Los Roques
En Monagas
Finca Cachicamo posada
Entre montañas y cielo por un camino tortuoso se llega a la finca de Hilda, una alemana que escogió Caripe como hogar después de trabajar como guía por toda Venezuela. Finca Cachicamo posada tiene una cabaña con dos habitaciones y dos baños, una especie de cabaña para poner colchones arriba y chinchorros abajo y un caney con cocina y comedor para uso de la visita. Río cerquita, paseos y bosque. Adoro este espacio de silencio y naturaleza escondido entre el paisaje.
Para ir: sector Los Cigarrones, Caripe.
Teléfonos: (0292) 414 9003 / (0414) 794 6685.
Correo: [email protected]
Facebook: Campamento Finca Cachicamo
En Portuguesa
Para conocer la naturaleza
Manuel Jiménez padre, Manuel Jiménez hijo y Soraida Pérez crearon la Cooperativa Turística El Silbón del Llano para que los visitantes conozcan las bondades naturales del estado Portuguesa. Ofrecen las excursiones al Chorro San Miguel, las Cuevas de los Puentes Oscuros, la Represa de Boconoíto y el Tobogán de San Ignacio. Tienen transporte y buenos guías. Me gusta mucho el trabajo que hacen y lo esmerados que son. Sorprende la variedad.
Para contactarlos: (0416) 8553 713 / 121 1955 / (0424) 533 0684.
Correo: [email protected]
En Carabobo
Visiten a los tallistas en sus talleres
Viviano Vargas falleció, pero su familia continúa la tradición del abuelo creando tallas de madera, cada cual con un talento especial. Una ricura visitarlos en sus talleres caseros donde exhiben las obras, aunque tallan bajo los árboles. Lo que hay que hacer es llegar a Canoabito y de inmediato verán el montón de casitas con letreros que dicen Tallas. Entran, conversan y dejan que les cuenten cómo Viviano los fue enseñando a sacar figuras de cualquier tronco. Casi siempre son imágenes religiosas, pero pueden hacer encargos de lo que quieran.
Para ir: Valles Altos de Carabobo. Después de Aguirre siguen camino hasta Canoabo.
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