Lola de los Santos, joven uruguaya de 22 años, es lesbiana y representa un ejemplo de inclusión para tanto para el Miss Uruguay como para el Miss Universo. El pasado 13 de diciembre se llevó a cabo la ceremonia en la que fue escogida como representante de su país al certamen de belleza más importante del mundo.
De los Santos no es nueva en los concursos de belleza, pues desde el 2017 se quedó con la corona de Miss Continentes Unidos Uruguay y en el certamen World Top Model Uruguay 2017.
Pero ella no es la única en romper tabués en certámenes de belleza: el año pasado Swe Zin Htet, la candidate de Myanmar se convirtió en la primera participante en declararse abiertamente gay. «Sé que tendrá un enorme impacto en la comunidad LGTBI de Birmania», dijo en su momento.
También en 2018 Miss España Ángela Ponce, cambió la historia de la comunidad LGBTQ+ al ser la primera mujer transgénero en llegar a Miss Universo. «España por fin ha cogido el toro por los cuernos y va a llevar a Miss Universo una realidad a la que no estamos acostumbrados. Es un avance muy importante porque manda un mensaje de inclusión, de respeto y de la necesidad de educarnos en la diversidad», dijo en una entrevista con El Tiempo en ese mismo año.
Angela Ponce, de 27 años de edad, trabaja en España en una ONG que defiende a jóvenes que se hallan en el mismo caso que ella.
La modelo reconoció que no fue nada fácil romper con todos los prejuicios sociales y los estereotipos de belleza. En 2015, cuando se alzó con la corona de Miss Cádiz, los organizadores de Miss Mundo vetaron su participación en este concurso aludiendo a su identidad sexual. ¿El argumento? no había nacido mujer. Entonces, comenzó su labor como activista de la mano de la fundación Daniela, que brinda formación en los colegios y ayuda a menores transexuales.