LITERATURA

El cangrejo ermitaño, una nueva antología de Arturo Gutiérrez Plaza

por El Nacional El Nacional

Visor Poesía y la Fundación para la Cultura Urbana ponen a disposición de los lectores en lengua castellana la antología El cangrejo ermitaño de Arturo Gutiérrez Plaza.

Es el tercer libro que publican como parte de un acuerdo de coedicion para promover la poesía venezolana. Previamente publicaron la Antología poética de Juan Sánchez Peláez y De la metáfora, fluida, de Verónica Jaffé.

El cangrejo ermitaño es una cuidada antología poética prologada por el también poeta y escritor uruguayo Rafael Courtoisie Beyhaut, Premio Casa de América de Poesía Americana en 2014 y miembro de la Academia Nacional de Letras de Uruguay.

El libro reúne poemas de títulos anteriores del autor como Al margen de las hojas (1991), Principios de Contabilidad (2000), Un sobre sin abrir (2006), Cuidados intensivos (2014), entre otros.

Sin embargo, y acudiendo a consideraciones de Courtoisie, El Cangrejo ermitaño más que una antología habitual -que sigue un orden cronológico o testimonial-, es un proyecto poético lúcido y laborioso un “trabajo de ingeniería estructural”, de re-composición.

En la obra Gutiérrez Plaza retoma cuidadosamente, valora, reordena cada poema, creando con ello un nuevo sentido o “nuevos vectores sémicos” demostrando como señala el prologuista “una lucidez extraordinaria y una enorme capacidad de comunicación con el lector”.

El cangrejo ermitaño, como libro y proyecto poético nada común, revela claramente la madurez, rigurosidad y particularidad de la voz poética de Arturo Gutiérrez Plaza en el contexto de la poesía venezolana e incluso en Iberoamérica.

Arturo Gutiérrez Plaza (Caracas, 1962) cuenta, además, con varios libros ensayísticos, antológicos y de investigación literaria. Es PhD en Lenguas Romances y Literaturas es profesor titular de la Universidad Simón Bolívar. Ha obtenido, entre otros, el Premio de Poesía de la Bienal Mariano Picón Salas (1995), el Premio Hispanoamericano de Poesía Sor Juana Inés de la Cruz (1999) y el Premio Transgenérico de la Fundación para la Cultura Urbana (2009).