Por sexto año consecutivo el teatro venezolano demostró ser un sobreviviente de la crisis del país desde el Festival de Jóvenes Directores Trasnocho. Una vez más los nóveles talentos se interesaron por participar en el certamen que este año se caracterizó por la gran cantidad de propuestas femeninas. De las 38 obras inscritas ocho llegaron a la etapa final, dos hombres y seis mujeres, que se presentarán en el Trasnocho Cultural del 17 de enero al 15 de marzo.
Verónica Etienne con Las sillas de Eugene Ionesco; Aguasanta Rojas con La ciudad rota de María Prado; Andrea Levada con La última actuación de Sara Bernhardt escrita por Néstor Caballero; Natacha Pérez con Añicos de Carlos Bé; Francisco Aguana con Escindida de Elio Palencia, Raquel Zapata con Danzon Park de Arístides Vargas, Danny Cruz con Passport de Gustavo Ott y Glenda Medina con ¿Te duele? de César Brie son los finalistas de la sexta edición del festival.
El jurado preliminar que los seleccionó estuvo conformado por Pilar Arteaga, Solveig Hoogesteijn, Héctor Manrique, Eva Ivanji y Gerardo Blanco. «Este año vinieron muchas propuestas dirigidas por mujeres. Hoy en día las mujeres se atreven a ser más consistentes que muchos hombres que tenían la hegemonía en el teatro», comenta Ivanji.
Para Solveig Hoogesteijn, directora general del Trasnocho Cultural, la presencia de jóvenes directoras es una señal de que el festival constituye un impulso para hacer arte dramático. «El concurso brinda una oportunidad para mostrar el talento venezolano», afirma.
Las dos obras ganadoras del Festival Jóvenes Directores Trasnocho se revelarán en marzo luego de que un nuevo jurado evalúe a los finalistas. Estos serán Pilar Arteaga, Andrés Rojas, José Pisano, Samuel Hurtado y Julie Restifo.
Los finalistas
Verónica Eitienne escogió Las sillas de Eugene Ionesco por ser una propuesta teatral fuera de lo común. La joven directora de 25 años de edad, proveniente de Maracaibo, afirma que, por ser un texto del teatro del absurdo, la historia no trata sobre un tema particular. «Quería apegarme al texto original para ver qué lograba aportar como directora. El público podrá comprender la ausencia, el vacío y la nada a través de esta pieza», explica.
Aguasanta Rojas, por su parte, declara que escoger La ciudad rota de María Prado fue un acto de compromiso y entrega porque la obra le brinda demasiada libertad al director. «Es la primera vez que se monta esta pieza en Venezuela. La historia aborda temas universales como la nostalgia, la pérdida de la memoria y los sueños desde un lugar lúdico. Pero, sobre todo, trata del proceso de reconstrucción después de que la ciudad se rompe», comenta.
La tercera finalista del certamen es Andrea Levada, de 22 años de edad, quien escogió La última actuación de Sara Bernhardt. Su propuesta como directora implica una visión actual de esta obra que escribió Néstor Caballero en 1981. «La pieza aborda temas como la religión, la política y la familia. Expone una cruda verdad que no se trata muy a menudo», opina.
Para otros de los finalistas, las obras que inscribieron en el Festival de Jóvenes Directores Trasnocho llegaron a ellos por casualidad. Este fue el caso de la también docente Natacha Pérez, quien se decidió por Añicos de Carlos Bé. La historia aborda el tópico de los abusos familiares con personajes sumamente humanos que exponen una realidad censurada en la actualidad.
El arte refleja a Venezuela
Las propuestas de Francisco Aguana, Raquel Zapata, Danny Cruz y Glenda Medina tienen un punto de conexión: reflejan la difícil situación que atraviesa Venezuela. Aguana, director proveniente de Maracay, se decidió por Escindida de Elio Palencia porque se centra en una familia cubana que sufre las consecuencias de la caída de la Unión Soviética. «Con el montaje quiero conseguir nuestra voz, qué es lo que nos caracteriza como venezolanos», afirma.
Al tema de la crisis se suma el tópico de la emigración, que será abordado por Raquel Zapata con su montaje Danzon Park. Esta obra de Arístides Vargas exhibe en el escenario conceptos como el amor, el desamor y los celos desde una propuesta surrealista.
Danny Cruz, por su parte, se decantó por una pieza sobre el abuso del poder, conflicto central de la pieza Passport, escrita por Gustavo Ott. «El tema de la incomunicación y cómo dos personas pueden hablar el mismo idioma y aun así no entenderse fue lo que más me gustó de la obra. Con el montaje mostraré mi versión de la pieza sin perder su esencia”, revela Cruz.
Por último, está la propuesta de Glenda Medina, quien plantea la necesidad de hablar del dolor que padece la sociedad venezolana con la obra ¿Te duele? de César Brie. «La sociedad ha sufrido sin saberlo, sin tener espacios para hablar de ello. Esta es una pieza que plantea el dolor desde su título: ¿Te duele? Y dolió», concluye.
Las ocho propuestas finalistas del festival se estarán presentando en el teatro del Trasnocho cultural a partir del 17 de enero todos los viernes, sábados y domingos.