La Gioconda de Leonardo Da Vinci, el cuadro más visitado del Museo del Louvre de París, volvió este lunes a su emplazamiento habitual en la sala de los Estados. Lo hizo después de pasar casi tres meses en la Galería Médicis por obras de renovación.
El famoso lienzo de Da Vinci fue trasladado en julio a la Galería Médicis por ser esta lo suficientemente amplia para acoger la gran cantidad de turistas que hacen cola para ver e inmortalizarse con la obra.
La sala de los Estados, habitualmente congestionada por los numerosos visitantes, ha acogido en los últimos 15 años a más de 100 millones de personas. Allí contemplan durante 50 segundos el enigmático retrato, según la institución.
Las obras pretendían mejorar la visibilidad sobre el cuadro, facilitar la circulación de los visitantes en la sala y rehabilitar el conjunto de la habitación.
La visibilidad sobre La Gioconda, protegida en una urna transparente, se ha mejorado gracias a la instalación de un vidrio antirreflectante. También se dispondrá de más información para descifrar la pintura de Da Vinci.
El artista, representante por excelencia del Renacimiento italiano, será objeto de una retrospectiva en este museo del 24 de octubre al 24 de febrero de 2020, con motivo del 500 aniversario de su muerte.
80% de los visitantes del Louvre van para ver La Gioconda. Sin embargo, este verano peregrinaron desorientados siguiendo las señales para guiarlos hacia su localización temporal.