La película georgiana Beginning, opera prima de la directora Dea Kulumbegashvili (Georgia, 1986), se alzó con la Concha de Oro a la mejor película del 68 Festival de Cine de San Sebastián.
La cinta se llevó también la Concha de Plata a la mejor dirección, el premio al mejor guion y la Concha de Plata a la mejor actriz para su protagonista, Ia Sukhitashvili.
Su proyección polarizó a público y crítica, pero guste o más o menos, hay consenso en que es la propuesta visual más hipnótica, original y arriesgada. Es solo la tercera ocasión en la que una película dirigida por una mujer obtiene la Concha de Oro.
Beginning es la historia de una doble opresión que sufre una mujer en la Georgia rural: como esposa del líder de una comunidad de Testigos de Jeohvá padece la persecución de la mayoría ortodoxa. Y, como mujer, de la violencia machista en general.
Mientras, el actor danés Mads Mikkelsen ganó la Concha de Plata al Mejor Actor por su versátil trabajo en la película Another Round, de Thomas Vinterberg.
Y la película Sin señas particulares de la directora mexicana Fernanda Valadez, se venció con el Premio Horizontes Latinos.
Se trata de una historia basada en hechos reales que explora la violencia en México y que el año pasado se llevó el premio al mejor proyecto en desarrollo de Cine en Construcción en este mismo certamen.