El largometraje La casa Gucci, de Ridley Scott, es uno de los estrenos más importantes de la temporada. La historia del clan Gucci, y el rol de Patrizia Reggiani (Lady Gaga) en el asesinato de Maurizio Gucci (Adam Driver), es el eje del filme, que se basa en hechos reales. Y a raíz del modo en el cual la película recrea esos acontecimientos es que los actuales herederos de Gucci manifestaron su disconformidad.
“Esto es extremadamente doloroso desde un punto de vista humano. Es un insulto al legado sobre el cual la marca está cimentada hoy en día”, reza el comunicado firmado por los herederos de Aldo Gucci (interpretado en el filme por Al Pacino). El escrito agrega: “La de los Gucci es una familia que vive honrando el trabajo de sus ancestros, cuya memoria no merece ser perturbada en función de poner en marcha un espectáculo que falsea los hechos, y que no le hace justicia a sus protagonistas”.
Por otra parte, el comunicado apunta contra la representación que la empresa Gucci tiene en el filme, haciendo hincapié en que Patrizia se mueve en un mundo masculino. En realidad la compañía siempre fue inclusiva. Y sobre ese tema, detalla que “hubo muchas mujeres que alcanzaron posiciones de poder”, pertenecieran o no a la familia Gucci.
Por otra parte, el texto también pone el foco en el personaje de Al Pacino. “La producción del filme no se molestó en consultarles a los herederos antes de mostrar a Aldo Gucci y a los miembros de la familia Gucci como simples matones, ignorantes e insensibles frente al mundo que les rodea”, subraya.
Por último, el comunicado da cuenta de la intención de los firmantes por velar por el buen nombre de los herederos. Concluye: “Los miembros de la familia Gucci se reservan el derecho de iniciar acciones con el fin de proteger el nombre, la imagen y la dignidad propia y de sus seres queridos”.
Más críticas
Tom Ford, el prestigioso diseñador que trabajó cuatro años en la firma y que aparece en el filme representado por el actor Reeve Carney, también tuvo una opinión en contra de los hechos según los muestra el filme.
En su opinión sobre el largometraje, Ford expresó: “En muchos momentos me reí a carcajadas, ¿pero se suponía que eso era lo que debía suceder? Después de ver La casa Gucci estuve profundamente triste varios días, algo que creo que nos sucederá a los que conocimos a esos protagonistas y esos acontecimientos. Me resultó complejo ver el humor y el tono camp a partir de algo que fue tan sangriento”.