Un jurado de Nueva York declaró este jueves al actor Kevin Spacey no responsable de lesiones contra el también actor Anthony Rapp, que lo acusó de haber intentado seducirlo y tocarlo con intención sexual en 1986, cuando era menor de edad.
Rapp, que ahora tiene 50 años de edad, buscaba una compensación millonaria por daños en el juicio civil contra Spacey, de 63, proceso que comenzó hace dos semanas y en el que el juez Lewis Kaplan decidió desestimar un cargo de agresión y otro de daño emocional intencionado, por lo que solamente se dirimía uno de lesiones.
Según CNN, el jurado deliberó poco más de una hora tras los argumentos finales de acusación y defensa, y concluyó que Rapp no ofreció suficientes pruebas de que Spacey le hubiera «tocado una parte sexual o íntima», por lo que el magistrado formalmente ordenó que se cerrara el caso.
Ese era el contenido esencial del delito de lesiones restante que el jurado no consideró probado y que bajo la legislación estatal neoyorquina se refiere al hecho de tocar a otra persona sin su consentimiento y de una manera que se pueda considerar ofensiva.
Rapp alegó durante el juicio que cuando él tenía 14 años y Spacey 26, y ambos trabajaban en el mundo del teatro, este último lo invitó a una fiesta en su apartamento de Manhattan a la que acudió solo, y Spacey, en estado ebrio, lo levantó en brazos, lo acostó en una cama y se encaramó sobre él.
Spacey, que subió al estrado para defenderse, negó la acusación y reveló detalles de su vida privada, describiendo a su padre como un «supremacista blanco y un neonazi» que no aceptaba su orientación sexual, lo que influyó en su carácter reservado y su rechazo al fanatismo y la intolerancia.
El denunciante, conocido por su papel en la serie Star Trek: Discovery, acusó públicamente a Spacey en 2017, en pleno estallido del movimiento MeToo, y posteriormente lo demandó acogiéndose a una nueva ley de Nueva York que permite a las víctimas de abusos sexuales infantiles acudir a la Justicia años después.
Pese a la victoria de Spacey en este juicio civil en Nueva York, el doble ganador del Oscar se enfrentará el próximo año a un juicio en Reino Unido por supuestamente agredir sexualmente a tres hombres hace una década, acusaciones de las que también se declaró inocente el pasado julio.