Jazmines en Lídice retrata cómo la vida se detiene por la pérdida de un ser querido. El duelo, la ausencia, el dolor y la violencia son algunos de los temas que trata la película dirigida por Rubén Sierra Salles, con guion de Karin Valecillos. El filme se presentará en 10 salas de Caracas, Barquisimeto y Valencia a partir de este viernes 29 de noviembre.
Basada en la obra de teatro homónima de 2013, la cinta cuenta la historia de una familia fracturada por la pérdida de uno de sus miembros, Raúl, quien falleció como consecuencia de la violencia en las calles de Caracas.
La protagonista de la cinta es su madre, Meche, interpretada por Gladys Prince, quien se sumerge en la tristeza y lucha por conservar el recuerdo con un duelo riguroso. Sus hijas, Anabel y Dayana, interpretadas por Rossana Hernández y Patricia Fusco, respectivamente, desean ayudarla, pero también necesitan rehacer sus vidas. Acompañadas por Aída, Sandra y Yoli, este grupo de mujeres buscará la fortaleza para seguir adelante y reconstruir la familia.
Meche es interpretada por Gladys Prince | Foto Archivo
El argumento de Jazmines en Lídice se basa en el relato de 54 mujeres que perdieron hijos por la violencia. La historia se inspiró en el testimonio que recogió la Fundación Esperanza Venezuela como parte de la campaña Ponte en su lugar. Producida por Cine Cercano y Tumbarrancho Films, la cinta sensibiliza al espectador en un contexto social en el que la estadística de fallecidos es parte de la rutina.
Para la actriz Rossana Hernández esta película no pretende ser una crónica social, sino mostrar el componente humano en las relaciones de las personas cuando deben enfrentar la pérdida. «Muchas veces tratamos a las víctimas de la violencia como números. Se nos olvida que esas personas tenían una vida, una familia, un nombre, comían de tal manera y vestían la ropa que ahora está sin uso en un clóset», afirma.
Contar desde el silencio
Karin Valecillos definió Jazmines en Lídice como un proceso de aprendizaje en el cual comprendió la importancia de crear historias que puedan adaptarse a cualquier formato. «En el cine todo lo que la palabra transmite debe hacerse a través de las imágenes. Llevar esta obra a la gran pantalla fue un acto de desprenderse de lo teatral», explica desde México, donde vive.
Para la escritora esta es una historia que se necesita contar y que invita a reflexionar. La adaptación cinematográfica de Jazmines en Lídice presenta una nueva forma de relatar la historia desde el silencio y desde lo que callan las protagonistas.
Esto supuso también un cambio en la percepción del espacio. En esta oportunidad, Rubén Sierra Salles consiguió que la casa se convirtiera en un personaje más a través de la poética de las imágenes de los muebles, las paredes o la lámpara.
«La historia va también sobre esa casa de la que hay que irse porque recuerda algo doloroso. Se trata de ese espacio en el que algunos te dicen que te debes ir, pero allí es donde están tus recuerdos. Logró hacer de la vivienda un lugar de memorias que es como el país: puede estar roto, pero es tu casa. Hay personas que se quieren quedar y seguir sembrando jazmines, otros se quieren ir. Todas son decisiones legítimas», explica Valecillos.
Sobre el proceso de creación, Valecillos reveló que cuando escribió la obra de teatro su propósito era crear personajes coherentes que respondieran al dolor de las madres cuando pierden a un hijo. «Ponerse en el lugar de ellas fue un ejercicio de empatía en su momento. Pero ahora que soy mamá me siento más comprometida y ligada al origen de esta historia. Es una sensación inimaginable», revela.
La película y la obra de teatro han sido para la escritora dos trabajos completamente diferentes. Pero en ambos formatos sus directores lograron apropiarse del texto y nutrirlo con algo propio. «En ese sentido, me siento afortunada porque mi texto sirvió para que ellos hablaran de temas que les importan», comenta Valecillos.
Jazmines en Lídice es una historia que llama a la reflexión. La película le muestra al espectador el valor de la vida a través del silencio, para sensibilizarlo sobre la violencia presente en las calles.
Se estrenará este viernes 29 de noviembre en el Cine Paseo del Trasnocho Cultural.
Poster oficial de Jazmines en Lídice. Foto Archivo
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