Las comedias románticas le dieron fama y dinero a Hugh Grant, pero el actor británico dice que le parecen «una burda mentira».
«La gran pregunta es si esa idea de la fusión de un hombre y una mujer, algo que todos anhelamos, es verdad, o una burda mentira», explicó Grant a periodistas en París, donde presentó su nueva película, Dungeons and Dragons: Honor entre ladrones.
«Tengo la impresión de que es una burda mentira, a pesar de que hice toda una carrera y una fortuna con ello», admitió.
«A ver, ¿cuántas relaciones realmente felices conocemos? No muchas», explicó.
«Todas esas comedias románticas que hice… estaría muy bien hacer una secuela ahora, seguro que empezaría con el divorcio y los abogados», reflexiona.
Como es usual con este actor de 62 años, los comentarios parecen ser un ejemplo clásico de humor británico, pero en una entrevista separada con la AFP, Grant adopta un tono más serio, al recordar sus inicios.
«Me hubiera gustado ser más ambicioso, haber tenido uñas más afiladas», dijo.
«Me parece que fui demasiado apático. Pude haber intentado cosas más difíciles cuando gozaba de mucha popularidad en Hollywood», explicó a la AFP.
«Podía haber hecho cualquier película que se me antojara… pero en realidad lo único que quería era mirar fútbol», recordó.
«Demasiado viejo y feo»
Grant cultivó siempre esa personalidad insegura. Fue en gran parte lo que sedujo en los años 1990, cuando Cuatro bodas y un funeral y Notting Hill lo encumbraron como el actor británico favorito del gran público, en todo el mundo.
Luego hubo meteduras de pata, y una tendencia a la autoparodia que a veces causa más extrañeza que hilaridad.
El mes pasado Grant protagonizó una entrevista en la alfombra roja de la gala de los Oscar que causó perplejidad.
Pero al mismo tiempo, el actor está en un momento dulce de su carrera, después del éxito de la serie The Undoing con Nicole Kidman en 2021, donde interpretaba el rol de un marido infiel. Y ahora reincidiendo con el papel de villano en Paddington 2 y de criminal en Dungeons y Dragons.
«Los villanos babosos me quedan bien», aseguró con una mueca.
«Me lo estoy pasando bien por primera vez en los últimos seis o siete años, ahora que soy demasiado viejo y feo para ser el héroe», comentó.
«En realidad así es como empezó todo: interpretando papeles y voces estúpidas. Un buen día me encontré encasillado en papeles protagonistas para lo que en el fondo no creía estar preparado», reconoció.
«Es realmente difícil ser el protagonista, el héroe», insistió. «Te pagan bien, pero es duro».
El misterio del actor
Pasar a interpretar papeles del malo de la película no fue tampoco una elección meditada. «Simplemente llamaron a mi puerta», dijo.
«A causa de las redes sociales, la fama ha cambiado mucho desde que me tocó a mí», reflexionó.
«Siempre fantaseé sobre ser una de esas estrellas misteriosas de los años 1930 y 1940, cuando no sabías nunca realmente cómo era esa persona en realidad», añadió.
«Podías mentir todo lo que quisieras, y el estudio también. Esa sería mi opción: mantener algo de misterio, no abrir una cuenta Instagram».
«Pero es solo mi consejo», zanjó.