Desde el primer álbum de Famasloop, Tres casas (2006), Alain Gómez tenía una idea en mente, un concepto para desarrollar. No quería que la experiencia de escuchar un disco se redujera a un instante. Pretendía ir más allá.
Con el pasar de los años, la banda que integran Alain Gómez, Luis Daniel González, Vanesa Gouveia y Rafael Urbina comenzó a construir a través de la trilogía Tres casas, Casa 4 y La quema los cimientos para la conceptualización de una idea que nació hace más de 16 años y que hoy continúa con el inicio de un nuevo ciclo: Lo más seguro es que quién sabe. “Desde ese primer disco teníamos pensado este que estamos lanzando ahora”, dice Gómez.
Cada uno de los discos tiene un rol en la historia construyen. Tres casas es la exploración musical en distintas áreas: la comercial, la intelectual y la espiritual, mientras que Casa 4 representa la perspectiva de quienes los escuchan, es también un forma de decirles que son parte del proyecto. La quema es la destrucción, literal y metafórica, de todo lo anterior y marca el inicio de una nueva etapa, que comienza con Lo más seguro es que quién sabe.
“Si la casa se quema, el techo se hace estrellas”, es la frase con la que cierra La quema y que, para su sorpresa, se convirtió en realidad. Tras el lanzamiento de ese disco, la banda decidió emigrar a México debido a la crisis política, social y económica en Venezuela. Empezó desde cero. Poco a poco, los integrantes armaron un estudio de grabación donde comenzaron a trabajar en su siguiente disco. No sabían, como decía la canción, que se quedarían sin casa.
Tras el terremoto de 2017 en Ciudad de México, el estudio que habían creado quedó destruido. Pero ese no sería el único obstáculo al que se enfrentarían durante la creación del nuevo disco. Tres años después, llegaría la pandemia de covid-19 que paralizó al mundo. De allí el nombre que escogieron: Lo más seguro es que quién sabe, frase que resume lo que vivieron durante su creación.
“Las quemas de las casas no fue sólo metafórico, fue literal y por eso cuando decimos: ‘si la casa se quema, el techo se hace estrellas’, es porque en esa situación tienes dos opciones: mirar hacia abajo y llorar sobre las cenizas o mirar hacia arriba y darte cuenta de que ya no tienes techo y se ven mejor las estrellas. Nosotros quisimos irnos por esa segunda opción y ver esas cenizas como un renacer y por eso el primer disco de la trilogía de las cenizas se llama Lo más seguro es que quién sabe y está representado por huevos”, explica Alain.
Nueve canciones le dan forma al disco. Todas de géneros distintos. Cada una está representada por un huevo, con color y textura diferente, que simboliza, además de la sorpresa, un universo distinto que permite ver cómo sería Famasloop si fuera una banda de punk o merengue. “Quisimos rebelarnos contra el algoritmo, que te dice que si eres una banda de reguetón tienes que hacer solo reguetón. Entonces, si estás escuchando una de nuestras canciones que es más espiritual, queremos que la siguiente sea totalmente distinta para así captar lo más precioso que tiene la gente que es su atención, para bien o para mal. La atención es un recurso muy valioso que la gente no debería dar por sentado y al que no le dan el valor que merece. Nosotros creemos que no subestimar a nuestra audiencia es precisamente exigir su atención”, asegura Gómez.
Aunque la primera canción de Los más seguro es que quién sabe, «Gira», se publicó en 2019, para Famasloop es difícil definir cuándo terminaron el disco. No fue uno, fueron tres. «Lo que estamos haciendo ahorita es seleccionar cuáles canciones van en cada uno. Hay temas de este disco que se terminaron hace poco y hay otras que están listas desde 2017”, dice Alain.
A “Gira” le siguieron «Balcón» (2020) y «Goxcila» (2021). Este año se conocieron las seis canciones que completan el disco: «Caníbal», «Dengue», «Nadie», «Resistencia», «Ombligo» y «Por ti», de las cuales cuatro forman parte de la banda sonora de la película Jezabel, de Hernán Jabes.
Aunque la conceptualización del disco estaba lista desde el inicio, la banda no quería publicarlo hasta estar completamente satisfecha con todos los elementos que le daban forma. Y, pese a las circunstancias, lo lograron. «Estoy emocionado con el hecho de que pudimos crear música por suficiente tiempo a nuestra manera, para después sacarla a la manera que exige el mundo de hoy. Es decir, nosotros vamos a sacar tres discos en dos años, que es bastante, pero jamás habría sido posible si no hubiese tenido ese tiempo para hacerlo o, por lo menos, no hubiera sido posible de la forma en la que a mí me gusta hacer las cosas».
Los obstáculos, que no fueron pocos, no frustraron a la banda. Al contrario, los músicos convirtieron la adversidad en oportunidades. “Escuchar un disco es una experiencia muy distinta a escuchar una canción, y yo valoro mucho la del disco. También valoro la de la canción, pero para lo que yo buscaba, el disco era importante y eso no solo ameritaba hacer canciones con las cuales estuviera feliz, implicaba que hubiese un discurso. No es lo mismo escribir un poema que una novela. Así como la última canción del disco anterior habla de este, Lo más seguro es que quién sabe habla de lo que viene en el próximo. Es como si fuera una serie», explica el cantante.
Y agrega: «Así como el disco anterior empezó a ser literal y metafórico, este también lo hizo porque Los más seguro es que quién sabe viene de una canción que dice: ‘Si quieres hacer reír a Dios, cuéntale cada uno de tus planes’ y, literalmente, cada vez que íbamos a sacar el disco ocurría algo. Primero un terremoto y luego la pandemia. Las circunstancias nos fueron probando que lo más seguro es que quién sabe. Cada vez que decíamos ahora sí pasaba otra cosa».
A diferencia de Tres casas, en Lo más seguro es que quién sabe Famasloop no quería dividir el disco. Querían que el álbum tuviera temas espirituales, intelectuales y comerciales, pero que los tres, de alguna u otra forma, se relacionaran. «Si yo quería dar la sensación de estas tres cosas necesito extremos de ambas y algo que esté en el medio. Una canción en el extremo del lado espiritual es ‘Gira’, que dura 8 minutos, casi instrumental y que es más una experiencia de meditación que una canción; también hay una canción punk de dos minutos como ‘Resistencia’, una canción con más equilibrio como ‘Caníbal’ y otra que se acerca más a lo comercial como ‘Por ti’. Hay otra en la que nos probamos como músicos, ‘Dengue’, pero en general los tres ingredientes están en todas las canciones y en el disco. Todos están empapados los unos de los otros”, detalla Alain.
Lo más seguro es que quién sabe cuenta con varias colaboraciones como, por ejemplo, las de Luis Jiménez, de Los Mesoneros; Henry D’Arthenay, de La Vida Boheme; DJ Yirvin, Betsayda Machado y hasta del comediante Álvaro Mora. «La música es como el sexo, la puedes hacer solo o acompañado, y acompañado siempre es más divertido», dice el cantante.
Para Famasloop cada uno de los invitados le aporta un elemento valioso, tanto al disco como a la historia que construyen. “Si la consecuencia del invitado que traes es que más gente escuche tu música, es súper bienvenido, pero no puede ser la causa. La causa debería ser la canción, el disco o lo que quieras decir a largo plazo. Lo que nosotros queremos decir es muy claro y se verá en los próximos discos. Queremos llegar a lo que para nosotros es la máxima expresión de la venezolanidad, que no solo es la arepa, es una mezcla, y para llegar a eso teníamos que pasar por varias cosas. No estoy pensando en que a la canción que saque le pueda ir bien mañana, estoy pensando en que el mensaje que voy a dar al final de todos los discos sea contundente”, explica.
Lo más seguro es que quién sabe es –asegura el cantante– una muestra de los próximos discos de la banda, que no se parecen en nada que hayan hecho antes. «Este disco tiene el rol de prepararte para lo inimaginable porque los otros dos no tienen absolutamente nada que ver con lo que ha hecho Famasloop jamás. Yo no pienso solo en términos musicales, pienso en una historia. Es como si fuera una película para mí”.
Para Famasloop no fue un reto hacer canciones de diferentes géneros, al contrario, es algo que se les da con facilidad. Para la banda el gran desafío ha sido no caer en la fórmula del algoritmo de las plataformas de música. “Para nosotros hacer géneros distintos no es difícil por una sencilla razón: de eso vivimos. Pararrayos es la parte comercial de Famasloop y con Pararrayos nos toca hacer cosas distintas siempre. Entonces, nuestro día a día consiste en hacer cosas extremadamente distintas entre sí. Lo que es realmente difícil es no caer en la tentación de trabajar en función del algoritmo en vez de que el algoritmo trabaje en función de ti”.
Alain Gómez reconoce el riesgo que implica lanzar un disco con las características de Lo más seguro es que quién sabe. “Yo sé que hacer un álbum así tiene consecuencias en los views y es muy fácil caer en la tentación de voy a cambiar lo que quiero hacer porque necesito que esto sea más popular. Pero yo creo que mantenerte firme en construir una carrera al final, desde el punto de vista económico y de ego, termina siendo más satisfactorio. En mi caso particular, yo no tengo otra opción. Cada vez que trato de traicionarme no puedo, no funciona”.
En los próximos discos la historia que está construyendo la banda, que tiene planes de venir a Venezuela en los próximos meses, será más clara. «Hay una historia que se irá revelando a lo largo de los discos y está por encima de los diálogos (las canciones). Salvando las distancias, Julio Cortázar decía que escribir un cuento es como ver una isla y no tener la menor idea de cómo llegar. Es decir, ya sabes que vas a esa isla, pero en el camino te pueden comer los tiburones o te puede caer una tormenta, y puede que, incluso, pierdas de vista a la isla; pero si realmente estás convencido la buscarás hasta encontrarla. Yo estoy convencido de la isla, cien por ciento. No tengo ni idea de qué va a pasar en el camino y le doy la bienvenida a todas las sorpresas que vendrán, pero estoy cien por ciento seguro de dónde termina esto y lo sé desde el primer disco”, finaliza.