A punto de cumplirse dos meses desde la trágica muerte del actor Matthew Perry, su expareja Kayti Edwards, pidió a las autoridades investigar más a fondo el caso, pues los resultados de la autopsia, que salieron la semana pasada, han dejado más preguntas que respuestas.
Las pruebas realizadas por el forense del condado de Los Ángeles revelaron que el fallecimiento de Perry se debió a «los efectos agudos de la ketamina» que encontraron en su organismo, así como ahogamiento, una enfermedad coronaria en las arterias y la buprenorfina (una sustancia para tratar el trastorno por consumir opiáceos).
Para Edwards los análisis forenses no resuelven nada, ya que aún queda la gran incógnita de: ¿cómo fue que el protagonista de Friends obtuvo la ketamina?
En una entrevista para el medio US Sun, Kayti aseguró que está completamente convencida de que su exnovio no consiguió este medicamento en las calles, y aunque seguía un tratamiento contra la depresión basado en infusiones de esta misma sustancia, la última dosis le había sido aplicada una semana antes de su fallecimiento, por lo que ya no aparecería en su sistema: «Estoy bastante segura de que en el cerebro de Matthew, las infusiones de ketamina en un médico contarían como si estuviera sobrio. En su cerebro no es lo mismo que salir a la calle a comprar crack o heroína. Ese probablemente fue el trampolín para que volviera a consumir drogas”, dijo.
Es por ello que, asegura, los médicos que atendieron a Perry deben estar bajo investigación, pues de tener en mente volver a usarla habría pedido consejo a alguno de ellos: «Creo que los médicos que habían estado trabajando con Matthew deberían ser investigados. Estoy bastante segura de que habría consultado a un médico”, agregó.
La mujer señaló, además, que el intérprete de Chandler no se encontraba bien los días previos a su muerte, pero que no todos supieron leer las señales: “Yo no estaba allí, así que no sé exactamente lo que pasó; pero conozco a Matthew y conozco los patrones que condujeron a esto. No parecía estar bien durante las últimas dos semanas de su vida. Las personas sobrias que lo conocieron nunca estuvieron con él cuando se estaba drogando, así que no conocían las señales”, finalizó.
Fue el pasado 28 de octubre cuando Matthew fue encontrado en el jacuzzi de su casa sin vida, noticia que conmocionó al mundo entero.