ENTRETENIMIENTO

Esto no es un apagón lleva un mensaje vigente a un año de la tragedia eléctrica

por Avatar Yenderson Parra

Filmado con un teléfono inteligente y con poco presupuesto, el crítico de cine Sergio Monsalve realizó su documental Esto no es un apagón, una producción que refleja el día a día de los caraqueños durante el megaapagón que dejó a oscuras al país en marzo de 2019. La cinta se estrenó en Youtube el 11 de marzo.

Monsalve se propuso documentar su experiencia personal y la de sus conocidos en medio de la crisis eléctrica. «Siempre he tenido la inquietud como de narrar lo que está ocurriendo y de ver cómo podemos pasar del cuestionamiento a la acción», explicó.

Para crear la narrativa del filme se sirvió de diferentes herramientas como la entrevista y  el testimonio, todo desde una perspectiva de primera persona.

«Este es el enfoque subjetivo que yo le quiero dar, que se enlaza y se enmarca dentro de esta narrativa contemporánea de la primera persona. El documental tiene esta intrahistoria sobre esta personalización del discurso», dijo Sergio.

Para realizar Esto no es un apagón, Monsalve se inspiró en cineastas como Rothy Panh, Agnés Varda, Luis Ospina, Ugo Ulive y Jafar Panahi; a este último le rinde tributo al evocar el título de su obra Esto no es una película (2011). «Quise tomar esos referentes para hacer en esta Venezuela actual un trabajo que pueda utilizarse para reflexionar y apuntar a otros discursos», dijo.

El apagón nacional de 2019 comenzó el 7 de marzo y se extendió por más de una semana; sin embargo, estados como Zulia o Táchira hoy día aún tienen graves problemas de energía. Fue un momento en el que se vio afectado el transporte público, el servicio de agua y también hospitales. En los 72 minutos que dura el documental se reflejaron estas situaciones desde la perspectiva del director.

En principio, Sergio pensó en crear una serie de video-reportes para las redes sociales con el fin de informar sobre lo que ocurría. Sin embargo, al percatarse de la magnitud de la situación y del material con que contaba decidió dar un paso más allá. «Quise aprovechar que en esta época existen varios tipos de técnicas de narrativa que dan pie a este tipo de propuestas. Me vi entonces con las circunstancias necesarias para contar una historia».

Uno de los detonantes para la creación de este largometraje está relacionado con la detención el 11 de marzo del periodista Luis Carlos Díaz, quien aparece en la producción. El material significó el último rastro de Díaz antes de su liberación el 12 de ese mes.

En el documental también participaron como testigos Fran Monroy, Albani Lozada, Unai Amenábar, Rolando Peña, Luis Bond, Adriana Núñez, entre otros.

Youtube contra la censura

Monsalve dice que Esto no es un apagón fue objeto de censura al momento de intentar su difusión en el país. «Sufrí la censura específicamente en el Festival de Cine Venezolano, donde el documental no fue admitido por una serie de pretextos. Tampoco se pudo distribuir en Los Galpones, que era algo que ya estaba programado», indicó.

El documental, no obstante, se estrenó en la Sala Cabrujas, en Los Palos Grandes, en junio del año pasado. Aunque para Monsalve era un paso importante llevar el mensaje a una mayor cantidad de personas.

«La fase final es estrenar el documental en la red para que no haya manera de torpedear el discurso, sino que la gente tenga acceso y sean ellos quienes lo juzguen con base en su dimensión», explicó Monsalve.

El documentalista destaca que Youtube es la plataforma más accesible y conocida por el público venezolano. Además, es una red social que sirve para difundir este tipo de historias personales.

«El objetivo de lanzar mi trabajo en YouTube es proyectar un documental que no puede ser estrenado en salas debido a la censura que impera en el medio. Es una manera de decir que el sistema no va a limitar la expresión y que los canales tradicionales quedaron pequeños para comunicar en plena libertad de formas y contenidos», indicó el comunicador.

De esta forma Monsalve sigue los pasos de Gustavo Tovar-Arroyo, quien también publicó su documental  Chavismo, la peste del siglo XXI en la plataforma de video para que pudiera difundirse libremente en el país, antes de que fuera censurado el año pasado por el TSJ.

Una alternativa para la producción nacional

El crítico de cine considera que Esto no es un apagón lleva un mensaje aún vigente en el país. Además, señala que este tipo de obras es un alternativa para la producción audiovisual venezolana. «Debemos pasar a la fase de contar nuestras propias historias de forma independiente», comentó.

«Este documental, con sus carencias, es un reflejo de la estética y la ética de este momento», agregó Monsalve. Acotó que el éxito de Waad Al-Kateab con su documental For Sama puede tomarse como ejemplo de este tratamiento.

@andy_brigid