Seis años tenía Óscar Olivares, más conocido como Olivares a secas, cuando su mamá lo inscribió en un curso de dibujo. Allí estuvo solo dos semanas: quería hacer ilustraciones del Hombre Araña, pero no lo dejaron.
16 años después, una de sus piezas más famosas es Spiderman conoce la arepa, en la que aparece el superhéroe comiéndose el tradicional alimentos venezolano mientras habla por teléfono.
Hoy, con 22 años de edad, Olivares puede decir que su trabajo ha sido reconocido nacional e internacionalmente: ha expuesto en certámenes como la ArtExpo de Nueva York y en la Convención de Cómics de Florida; ganó el Premio Iberoamericano de Emprendimiento Online 2015 por su serie Bandera de Venezuela, y es conocido, principalmente, por las ilustraciones que realizó durante las protestas de 2017 en contra del presidente Nicolás Maduro, una de ellas de su amigo Juan Pablo Pernalete asesinado el 26 de abril en Altamira.
En septiembre participará en una muestra en Houston y en octubre irá como artista invitado al Passion for Freedom Art Festival de Londres.
Después de varios viajes de trabajo, incluido el taller de cómics que impartió en Malasia, Olivares presenta en el Tolón Fashion Mall la exposición más grande que ha exhibido en el país: Venezuela, una luz infinita.
En 24 piezas plasmadas en acrílico y en las que combina el dibujo digital y a lápiz, el ilustrador muestra un país lleno de luz, colores y sueños. En ellas exhibe elementos nacionales como las guacamayas, la arepa, el Salto Ángel o una Caracas nocturna que, extrañamente, no causa miedo.
“En esta coyuntura yo, como joven caraqueño, busco la manera de mostrar la Venezuela que quiero tener. No me interesa presentar en mis obras los problemas, porque siento que en la calle ya los ves, y hay muchos artistas trabajando en eso”, dice Olivares, quien en 2013, luego de que le robaron el celular, empezó a hacer ilustraciones de denuncia. Pero el feedback pesimista que recibió en Instagram le hizo virar su estilo. “Quiero que al ver un dibujo mío, la gente se sienta alegre y motivada”, agrega.
En Venezuela, una luz infinita, los objetos y los paisajes fueron concebidos de manera simbólica, una orientación que le permite al artista demostrar que en lo cotidiano pueden existir grandes ideas: así, la arepa se manifiesta como un sol y el Salto Ángel es el camino a la eternidad.
Pero el autor no ha olvidado sus gustos de pequeño: entre los cuadros hay un Olivares niño vestido con un traje del Hombre Araña. De este modo da el ejemplo a los adolescentes que asisten a sus talleres. “Cuando ellos me preguntan si pueden dibujar algún motivo, yo les digo que hagan lo que quieran. Porque lo que más le inspira a uno para trabajar es tener libertad. Es imposible reprimir el arte”, dice.
Cuando tenía 14 años era fanático del Caracas Fútbol Club y a esa edad empezó a dibujar a los jugadores y a la hinchada desde las gradas del Estadio Olímpico de la UCV, un trabajo que publicó en las redes sociales y se viralizó. Luego de cumplir los 15, la Lavinotinto.com lo contrató para que realizara dibujos sobre el fútbol nacional. Es lo que depara el trabajo libre.
El ilustrador también ha impulsado una labor como conferencista, faceta con la que pretende inspirar a quienes se sienten decepcionados por la crisis venezolana. En Venezuela, una luz infinita impartió un taller sobre cómics el 4 de agosto y el sábado 11, a las 3:00 pm, ofrecerá la charla “Hay un héroe en todos nosotros”, que ha realizado más de 100 veces en 5 países. “Con mi obra, lo principal es inspirar a la gente. Cuando hago una pieza, mi meta no es que vaya a ser la más cara o si se venderá, sino contagiar a las personas de lo que siento mientras dibujo: una felicidad grande, un amor tremendo por el país y por el mundo. Yo nunca busqué las conferencias, me empezaron a llamar de los colegios para que contara mi historia y, en uno de esos encuentros, alguien se puso a llorar. Así decidí que había que desarrollar el trabajo”, expresa.
Venezuela, una luz infinita
Olivares
Piso 5, Centro Comercial Tolón
Horario: de 10:00 am a 7:00 pm
Entrada libre