Apóyanos

Ensamble B11 quiere abrir caminos para la música afrovenezolana

Entre julio y agosto, los integrantes de la agrupación caraqueña nacida de los talleres de Fundación Bigott se convirtieron en embajadores de la música afrovenezolana con su primera gira internacional.Se presentaron en festivales y ferias musicales en diversos países de Europa y atesoran un momento especial: conmover hasta las lágrimas a Buika con sus voces
    • X
    • Facebook
    • Whatsapp
    • Telegram
    • Linkedin
    • Email
  • X
  • Facebook
  • Whatsapp
  • Telegram
  • Linkedin
  • Email

Para algunas personas el nombre del Ensamble B11 no era familiar hasta que la semana pasada cuatro de sus integrantes protagonizaron un video viral en las calles de Madrid junto con la cantante española Concha Buika. En el clip, Nayaleth García, Deilyn Uzcátegui, Ivanna Lira y Belkys Figuera, fundadora de la agrupación caraqueña, conmovieron hasta las lágrimas a la intérprete de “Mi niña Lola” con “Canto de lavanderas”, un tema de las costas venezolanas.

El encuentro fue una coincidencia. Ocurrió al final de la gira Lo vocal es lo nuestro que el Ensamble B11, integrado por Nayaleth García, Víctor González, César Alcalá, Manuel Herrera, Ivanna Lira, Benito Palacios, Adrián Peña, Deilyn Uzcátegui y Belkys Figuera, realizó por Europa, la primera del grupo. De regreso al hotel en que se hospedaban, luego de un día de reuniones con colegas músicos, las cuatro integrantes del grupo decidieron acortar camino por una calle vacía, donde –para su sorpresa– se encontraron con Buika. Estaba sentada en un banco conversando con otros músicos.

Emocionadas, se acercaron para saludarla y pedirle una foto. Sabían que era un momento único y querían hacer algo especial para ella. Y decidieron dedicarle una breve serenata. Sentían que era lo mínimo que podían hacer para la cantante, quien rompió en llanto al escuchar las voces de las venezolanas. “No pierdan la conexión única que tienen”, les pidió emocionada mientras abrazaba fuertemente a cada una de ellas.

El emotivo encuentro fue la guinda de una gira cargada de momentos especiales y aprendizajes que hermanaron a los integrantes del Ensamble B11.

¿Cuándo comenzó el viaje del Ensamble B11?

Entre julio y agosto, Ensamble B11 realizó su primera gira internacional, con la que visitaron ciudades de España, Portugal, Austria, Hungría y República Checa. Participaron en ferias y festivales musicales, donde ofrecieron conciertos y talleres de canto, danza y percusión.

La gira surgió a partir de varias invitaciones que recibieron luego de su participación, el año pasado, en el feria iberoamericana de música EXIB Música, en Portugal. “Allí había muchos programadores de festivales de otros países, quienes pudieron ver nuestro trabajo, nuestra performance, y nos invitaron a los festivales y ferias en los que participamos este año”, cuenta Belkys Figuera, profesora de canto y directora de Ensamble B11.

La agrupación de música afrovenezolana, que fusiona elementos del beatboxing y que se gestó en los talleres de la Fundación Bigott, participó en 21 Distritos (Madrid, España), La Pinada (Valencia, España), Festrival Glatt Und Verkehrt (Krems, Austria), Festival Folk Holidays (República Checa), Festival Tradidanças (São Pedro, Portugal), Sala Bota (Lisboa, Portugal), Magyar Zene Haza y Sziget Festival (Budapest, Hungría).

Al ser su primera gira internacional, el grupo quería un repertorio especial que mostrara la variedad de la música afrovenezolana. “Tenemos un repertorio bastante amplio que nos permite durar más de 70 minutos en el escenario y también nos permite mostrar toda la gama de géneros afrovenezolanos que están dispersos por el país y no solo en una zona, y lo utilizamos en todas las presentaciones (…) Somos tan ricos en géneros tradicionales que ninguno se parece, todos son diferentes tanto en la forma de tocar como en los instrumentos que se utilizan. Eso nos permitió mostrar en cada país algo diferente sin necesidad de estar cambiando el repertorio porque también tenemos temas de fusión con géneros del Caribe, que nos permite ser diversos en el escenario”, explica Figuera.

Un público que bailó y gozó de principio a fin

Ensamble B11 se ganó mucho más que el aplauso de un público europeo poco familiarizado con los ritmos afrocaribeños, pero que aún así se animó a bailar y cantar los temas que interpretaron los venezolanos.

Aunque el público en cada país era muy distinto, la receptividad fue positiva en todos. En algunos países, al principio, el grupo sintió temor de que las personas no disfrutaran su música. “El de Austria es un público que escucha y observa mucho. Teníamos ese temor y pensábamos: ‘¿será que les está gustando lo que estamos haciendo?’. Pero al final decimos ‘dancing’ y todo el mundo empezó a bailar y disfrutar”, dice Manuel Herrera.

Para el ensamble, lograr que públicos como los de Austria o República Checa bailaran fue algo muy satisfactorio porque les habían advertido que era muy difícil lograrlo. “Cada país tuvo sus momentos especiales. Por ejemplo, en Austria nos habían dicho que el público solo iba a escuchar porque era muy difícil animarlos a bailar y para mi fue muy grato que bailara desde el comienzo”, dice Belkys.

Pero, sin duda, el público estrella de la gira fue el de Portugal, coinciden todos los integrantes del ensamble. Fue el más efusivo de todo el tour, por lo que los shows de Lisboa y São Pedro fueron los más animados y los que más disfrutaron los músicos. “La mayor receptividad fue la de Portugal, fueron los que más bailaron, gritaron, saltaron. Fue donde más explotó la emoción a nivel de público. No es que en los demás países no se hayan emocionado, pero la euforia en Portugal fue muy distinta”, recuerda Víctor González.

Lo mismo ocurrió con los talleres. “El público de Portugal fue increíble, tenían una energía sorprendente. Pasaban desde las 7 de la mañana hasta las 4 de la tarde bailando, tocando y asistiendo a nuestros talleres”, dice Manuel. Aunque a Adrián Peña, quien dictó los talleres de percusión, le sorprendió la receptividad de los participantes checos. “Nunca pensé que iban a tararear las onomatopeyas que usualmente solemos emplear para los ritmos afrovenezolanos. Para nosotros fue un impacto y algo emocionante porque no esperábamos esa respuesta tan positiva”.

Al final de cada taller, cuenta Ivanna Lira, se unía la danza, canto y percusión en un solo espacio y se armaba una gran fiesta multicultural.

Ensamble B11

Foto Ariany Brizuela | El Nacional

No todo fue alegría y fiesta. Antes de comenzar la gira, Ensamble B11 desarrolló una campaña de crowdfunding, a través de la plataforma InCresc, para cubrir gastos del viaje.

“Estamos familiarizados con el crowdfunding solo para recaudar dinero para enfermedades o tragedias y no tiene que ser solo para eso. Creo que hay que cambiar el switch y hacerle entender a la gente que esto tiene que ver con otra cosa. Además, era distinto porque teníamos un sistema de recompensas. Para nosotros fue un experimento ver si esta plataforma podía funcionar, quizás no estamos preparados para ese tipo de ayuda. El secreto para que todo funcionara fue trabajar en equipo para un fin común”, explica Ana María Díaz, productora de la gira.

También acudieron al Estado y a la empresa privada en busca de patrocinio, pero la respuesta no fue positiva. Lograron el apoyo de Marca País y P.A.N.

Pese a las dificultades para conseguir financiamiento, cancelar la gira no era una opción. Con los fondos que tenían lograron sacar el viaje adelante, ajustando el presupuesto, recortando gastos, pero sobre todo trabajando de forma colaborativa, en equipo.

“Creo que esto nos dio mucho crecimiento personal. Nos ayudó a entender y valorar muchas cosas que a veces tenemos muy fáciles. Está gira autogestionada nos hizo entender que no todo es tan fácil, que todo tiene un valor y eso fue muy enriquecedor para cada uno de nosotros y un gran aprendizaje que nos hará  valorar todo lo que vendrá y a entender que el trabajo en equipo, el trabajo desde la pasión, es necesario cuando no tienes todo puesto en bandeja de plata”, asegura Belkys.

Embajadores de la Venezuela 

La gira del Ensamble B11 coincidió con las aún disputadas elecciones presidenciales en el país, el pasado 28 de julio, cuyos resultados anunciados por el Consejo Nacional Electoral dieron como ganador a Nicolás Maduro y que la comunidad internacional reconoce como fraudulentos, así como con las protestas de los días siguientes en rechazo a los resultados, en las que más de 1600 personas han sido detenidas, según cifras del Foro Penal.

Desde la distancia, los músicos vivieron con mucha preocupación e incertidumbre los días después de las elecciones. No estaban seguros si mucho de lo que veían en redes era real. Se mantuvieron en constante contacto con sus familias para asegurarse de que estuvieran bien y enfocarse en los shows.

“Tratamos de mantener la calma siempre. Pensábamos: ‘Estamos aquí representando al país’, y nos sentíamos orgullosos de que en un momento como este nosotros seamos los voceros de que esto es Venezuela. Creo que eso siempre es lo que hay que mostrar afuera, lo positivo, y es lo que hicimos”, cuenta Belkys Figuera. “Creo que los venezolanos afuera se sintieron orgullosos de lo que hicimos, es algo que vemos en los comentarios del video con Buika”.

A los integrantes de la agrupación no les pesó no estar en Venezuela para votar en las elecciones, porque lo que estaban haciendo con la gira también era una forma de contribuir con el país. “Aunque no pude votar, yo sentía que estaba cumpliendo con mi país porque lo estaba representando afuera y creo que eso también tenía mucho valor”, dice la directora del Ensamble B11.

Ensamble B11

Foto Ariany Brizuela | El Nacional

“Desde que salimos de gira, el 12 de julio, todos nos pusimos sobre los hombros la bandera de Venezuela. Obviamente, no podíamos estar desconectados de lo que estaba pasando por más que estuviéramos lejos haciendo música, pero siempre sentimos a nuestro país y nuestra cultura en las venas, por eso adaptamos el voto de representar a Venezuela y ese era el mensaje que transmitimos en cada presentación”, agrega César Alcalá.

La gira le dio a la agrupación muchas satisfacciones. Durante el tiempo en España, el ensamble tuvo la oportunidad de colaborar con Pancho Montañez, que se publicará en septiembre, y con Çantamarta, que saldrá en octubre. El ensamble también trabaja en su segundo disco, que sucederá a Afrovenezuela (2022).

De esta primera gira los integrantes de Ensamble B11 se llevan un gran aprendizaje, la satisfacción de ser embajadores de la música afrovenezolana, pero sobre todo la convicción de continuar abriendo caminos para el género.

“Además de un reto, esta gira fue un gran logro de vida. Siempre le digo a los muchachos que vean hacia el futuro y se visualicen en lugares grandes. Por eso, siempre mantuve que la gira había que hacerla como sea, saltando barreras y haciendo de todo para lograrlo, porque eso les iba a dar fortaleza para creer en sí mismos”, finaliza Belkys Figuera.

El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!

Apoya a El Nacional