El cine español se reúne este sábado en Sevilla para sus Premios Goya, en una ceremonia que servirá para rendir tributo a una de sus grandes figuras, el director Carlos Saura, fallecido la víspera.
Considerado uno de los cuatro grandes realizadores del cine español, junto a Luis Buñuel, Luis García Berlanga y Pedro Almodóvar, Saura murió a los 91 años el viernes, justo antes de unos Goya que le habían reservado un premio de honor que ya se le entregó hace unos días en en su casa.
«La 37ª edición de los Goya conmemorará la memoria de un creador irrepetible», adelantó la Academia del Cine español, sobre el director de La caza, Cría cuervos o Ay, Carmela, distinguido en tres ocasiones por el Festival de Berlín y dos por el de Cannes.
La actriz francesa Juliette Binoche, de 58 años de edad, que será distinguida con un Goya internacional, dijo el viernes sentirse honrada de estar en Sevilla por coincidir con artistas que la «inspiraron».
Un buen año
La ceremonia pondrá el broche de oro a un buen año para el cine español.
As Bestas, con casi 700.000 espectadores y 4,4 millones de euros recaudados (4,7 millones de dólares); Alcarrás, ganadora del Oso de Oro en la Berlinale, o la película animada Tadeo Jones 3: la tabla esmeralda, con casi 12 millones de euros recaudados, optan a premios.
El galardón de la Academia del Cine español (AACCE) es un busto que representa al pintor español Francisco Goya, y fue elegido porque su nombre era representativo y corto, como Óscar y César, aunque el artista nada tuvo que ver con el cine.
En la 37ª edición de los Goya, apodados «los cabezones», parten como favoritas As Bestas, con sus 17 nominaciones; seguida por Modelo 1977, con 16, y Alcarrás y Cinco lobitos con 11.
As Bestas y Alcarrás coinciden en retratar con amargura la vida en el campo, después de los muchos sueños bucólicos alimentados por la pandemia de coronavirus.
As Bestas, dirigida por Rodrigo Sorogoyen, narra la historia de una pareja de ecologistas franceses que se va a vivir a una aldea de Galicia (noroeste), y cuyo proyecto de vida acaba chocando trágicamente con los lugareños, en particular con dos hermanos.
«Lo que nos gustó fue imaginar las motivaciones de esos cuatro personajes, cómo puedes odiar tanto a alguien vecino, y la de los dos extranjeros, una gente que no es bienvenida, pero que dice ‘yo no me voy a ir de aquí'», explicó Sorogoyen a la AFP en el Festival de Cannes.
Alcarrás, interpretada por actores aficionados y dirigida por Carla Simón, narra en cambio las dificultades de una familia de agricultores catalanes que se ve confrontada a la industria de los paneles solares.
«Mis tíos cultivan melocotones en Alcarràs, pero la historia es ficticia», explicó a AFP la directora Carla Simón, que de pequeña pasaba los veranos en ese pueblo catalán.
Las dictaduras como tema
Modelo 1977, de Alberto Rodríguez, que lleva el nombre de la que fue durante muchos años la gran cárcel de Barcelona, está basada en la historia de los presos comunes que a la muerte del dictador Francisco Franco exigieron una amnistía como la que benefició a los presos políticos.
Sus dos protagonistas, Javier Gutiérrez y el joven Miguel Herrán competirán por el galardón a Mejor Actor.
Finalmente, Cinco lobitos, narra la historia de una mujer que vuelve una temporada a casa de sus padres, lo que le sirve para redescubrir la relación con su madre a la luz de su reciente maternidad.
El premio a la Mejor Película Iberoamericana tiene como favorita incontestable a la argentina Argentina, 1985, el filme de Santiago Mitre interpretado por Ricardo Darín sobre el juicio a los responsables de la dictadura militar.
Compite con la colombiana La jauría, la mexicana Noche de fuego, la boliviana Utama y la chilena 1976, cinta relacionada también con una dictadura, la de Augusto Pinochet.