El actor y músico Drake Bell, que se dio a conocer de manera internacional con la serie Drake & Josh (2004-2007), fue condenado a dos años de libertad condicional después de declararse culpable de dos delitos contra menores de edad.
El intérprete fue juzgado por poner en peligro a una menor de edad («child endangerment» en el código estadounidense) y difundir material perjudicial a menores, por los delitos tendrá que prestar 200 horas de servicio comunitario y su nombre formará parte del registro de delincuentes sexuales.
“Hoy acepto esta sentencia porque mi conducta fue incorrecta. Lamento que la víctima haya sido lastimada de alguna manera, obviamente esa no era mi intención», aseguró Bell en un comunicado difundido por su abogado.
Se desconocen los detalles exactos de lo sucedido entre el actor y la víctima.
Los documentos publicados por la Policía indican que la víctima tenía 15 años de edad cuando, en 2018, presentó una denuncia en Canadá contra Bell por un incidente ocurrido en diciembre de 2017 durante un concierto en Ohio. Tras esa denuncia, las autoridades canadienses se pusieron en contacto con la Policía de Cleveland.
Al parecer, en los meses previos al espectáculo «el músico tuvo conversaciones inapropiadas con la víctima que, en ocasiones, eran de naturaleza sexual» y envió material gráfico inapropiado, apuntan los escritos oficiales.
El informe señala que la denunciante acudió al concierto y allí «Bell violó su deber de cuidado y, al hacerlo, creó un riesgo de daño para la víctima».
Bell ya fue condenado en 2015 por conducir bajo los efectos del alcohol y, el pasado verano, su exnovia Melissa Lingafelt lo acusó en redes sociales de abuso físico y sexual durante los años de relación que compartieron entre 2006 y 2008, unas alegaciones que el actor negó tajantemente.
Gracias a las series Drake & Josh y The Amanda Show, Bell se hizo muy popular en Latinoamérica. De hecho, el artista se hace llamar Drake Campana en sus redes sociales y ha publicado canciones bilingües como «Fuego lento» y «Diosa»