ENTRETENIMIENTO

Un domingo sin luz en el Trasnocho Cultural

por Avatar Crysly Egaña

Miriam Guzmán quería un momento de esparcimiento. Sin aviso ni razón aparente el primer apagón nacional se registró el 7 de marzo, y a ese le siguieron aproximadamente cuatro, que ocurrieron en la última semana del mes. Exhausta, anhelaba algo de distracción y descanso de la “tensión” de su casa. No era la única que se sentía atrapada por la incertidumbre; su amiga Yolanda Sánchez compartía la sensación.

Pese a la amenaza latente de otro corte de luz, se citaron en Trasnocho Cultural. Ese “regalo propio” le ganó la batalla a la inseguridad eléctrica. El cineforo sobre la película La buena esposa se realizaría en la Sala Plus 2, a las 10:00 am.

Miriam llegó primero al Trasnocho para comprar las entradas. Yolanda tenía que recorrer más kilómetros desde Guarenas hasta Las Mercedes. A las 9:40 am la advertencia se cumplió: una vez más gran parte de Venezuela se quedaba sin servicio eléctrico.

Más de 60 personas esperaban la proyección del filme y la posterior discusión de la película inspirada en el libro de Meg Wolitzer y que le valió una postulación al Oscar a su protagonista, Glenn Close. Lejos de suspender las actividades, los organizadores del cineforo, junto con el personal de protocolo, se pusieron manos a la obra.

Un video beam y unas cornetas en los espacios de Soma Café se convirtieron en una improvisada sala de cine. La planta eléctrica del Centro Comercial Paseo Las Mercedes suministraba luz a las áreas comunes. Un tomacorrientes fue suficiente para llevar a cabo la actividad sin otra interrupción.

El cineforo de la película La buena esposa se realizó en colaboración con Avesop e Ideas de Babel

A pocos metros, en la sala TAC, se inauguraba Principios de incertidumbre, la exposición de aproximadamente 5.000 autorretratos de Édgar Rodríguez Larralde. Más de 20 personas entre amigos, familiares e interesados en su obra acudieron a la convocatoria.

Una mujer se acercaba a cada dibujo detenidamente y lo iluminaba con la linterna del teléfono. “Tengo mucho tiempo viéndolo hacer esto. Yo tenía que venir a ver el resultado de todos estos años”, dijo Falia López, vecina del artista.

Los 450 pliegos, que tienen plasmados entre 9 y 15 dibujos, fueron realizados en los últimos 20 años, y en ellos convergen 3 ideas: el principio de incertidumbre de Heisenberg, la pérdida de certeza por dilemas personales y los autorretratos del pintor mexicano José Luis Cuevas.

En los primeros dibujos se observan trazos tímidos o miedosos que, con el hábito, se convirtieron en robustos. Así lo define el artista plástico y amigo del autor Ricardo Pérez Quintero al acercarse a un álbum que contiene los dibujos originales desde 1993 a 1995, y quien asistió a la inauguración como un acto de “solidaridad con un colega, y resistencia contra quien quiere controlarnos”, dijo.

Principios de incertidumbre estuvo acompañado por una degustación de café patrocinada por Aroma Café.

Pasadas las 2:00 pm, Miriam y Yolanda retornaron a sus casas con ánimo, porque no perdieron el viaje, pese a la falta de electricidad. Algunos amigos continuaban acompañando el éxito de Rodríguez Larralde y la organización de Trasnocho Cultural estudiaba la posibilidad de reprogramar el veredicto del 5° Festival de Jóvenes Directores. Pero no, al final de la tarde el jurado dio su opinión: gracias a la puesta en escena de Riñón de cerdo para el desconsuelo, Camila Rodríguez resultó ganadora de la más reciente edición del galardón que reconoce el trabajo de noveles directores.