Pasadas las 4:00 pm, luego de concluido el homenaje y servicio religioso en honor al maestro José Antonio en la sala Simón Bolívar del Centro Nacional de Acción por la Música, sus restos fueron trasladados al Cementerio del Este –escoltados por miembros de las Fuerzas Armadas– donde recibieron cristiana sepultura.
Decenas de coronas de flores que fueron apostadas en el suelo, después fueron lanzadas a la tumba por músicos del sistema que estuvieron presente entre los cientos de personas que acudieron a darle el último adiós al maestro.
Familiares, amigos, directivos del sistema, y autoridades como Tibisay Lucena, presidente del CNE, y quien formó filas en el Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela, estuvieron en el acto. También acudió Nicolás Maduro Guerra.
El sentido homenaje musical que ofrecieron los miembros de la Coral Nacional Juvenil Simón Bolívar tuvo entre su repertorio dos madrigales compuestos por el maestro, “Sol que das vida a los trigos” y “Madrigal”, estrenado hace dos semanas. José Ángel Sánchez, director de la coral, aseguró que la pieza fue escuchada por el propio Abreu. También interpretaron “In paradisum”, del catalán Josep Vila, y el “Ave María” de Javier Busto.
Un ensamble de metales, integrado por miembros de las distintas orquestas que forman parte del sistema de orquestas, dirigido por Pedro Carrero, interpretó “La llegada de la Reina de Saba”.
La ceremonia finalizó con la interpretación del Himno Nacional, a cargo de la Coral NacionalJuvenil Simón Bolívar.
Entre aplausos y lágrimas, el maestro descansaba en paz.