El intento de la estrella del pop Britney Spears de no estar bajo la tutela de su padre, James Spears, fracasó cuando un tribunal de Los Ángeles rechazó la solicitud, informó Variety.
James Spears ha sido el tutor legal de su hija desde 2008, cuando la cantante sufrió un colapso en público. Por ello, en 2019 se convirtió en el único capaz de tomar decisiones sobre las canciones de Spears después de que el abogado Andrew Wallet renunció a su co-curaduría.
En una audiencia el martes, la jueza de la corte superior de Los Ángeles, Brenda Penny, se negó a suspender a James Spears de su tutela. Sin embargo, no descartó futuras peticiones para su remoción o cancelación.
“Mi cliente me informó que le tiene miedo a su padre”, dijo al juez el abogado de Britney Spears, Samuel D. Ingham III. «No volverá a actuar si su padre está a cargo de su carrera».
Mientras tanto, la empresa financiera Bessemer Trust fue nombrada co-conservadora.
La abogada de James Spears, Vivian Thoreen, argumentó que bajo la tutela de su cliente, el patrimonio neto de Britney Spears salió de la deuda para alcanzar los 60 millones de dólares.
La medida tiene lugar en medio de la campaña #FreeBritney, que afirma que el progenitor está controlando a la cantante en contra de su voluntad. El mes pasado, la artista pudo expandir su equipo legal para exigir sus derechos.
Su progenitor asumió la tutela a raíz del colapso mental de la artista en 2007. Recientemente, la conservadora Jodi Montgomery intervino para ayudarlo. Desde entonces, ha criticado el movimiento #FreeBritney, comparando a sus partidarios con los teóricos de la conspiración.