Britney Spears alarmó a sus seguidores en redes sociales luego de que borró su perfil de Instagram, lo que los llevó a realizar una llamada al 911 para que la policía asistiera a la cantante.
En los últimos meses, la conducta de la intérprete de «Toxic» generó especulaciones sobre su estado mental, ya que suele subir clips en los que aparece bañándose y moviendo su cuerpo frente a la cámara de forma extraña, lo que generó incomodidad en sus seguidores, quienes pidieron que dejara de publicar contenido de ese tipo.
Incluso la propia cantante se tuvo que defender de los cientos de comentarios agresivos que recibió en Instagram.
Ahora, la preocupación de los seguidores iría más allá, pues TMZ reportó que el susto por la acción de la famosa fue tal que un equipo de seguridad tuvo que acudir a casa de la estrella para verificar que no estuviera en peligro.
El portal señaló que las autoridades de Ventura County explicaron que Britney eliminó la cuenta en las últimas 12 horas. Los oficiales determinaron que no había razón para que la cantante estuviera en peligro, aunque hasta el momento se desconoce si pudieron entablar conversación con la cantante o fue un tercero quien intercedió.
Asimismo, previo a cerrar la cuenta, la cantante dejó un mensaje en el que acusó de infidelidad a su esposo Sam Asghari.
El incidente se produjo a unas semanas de que la que fuera considerada la Princesa del Pop perdiera el control en un restaurante mientras se encontraba con su pareja. Los testigos mencionaron que tuvo una actitud «maniática». Luego salió a la luz que su reacción fue en respuesta al acoso que recibió de quienes la estaban fotografiando.
A Britney no le pareció que fuera grabada y comenzó hablar con palabras antisonantes al tiempo que se tapaba el rostro con el menú, hasta que decidió irse del lugar.
Anteriormente también arremetió contra su hermana Jamie Lynn Spears debido a que la actriz de Nickelodeon expresó en un show televisivo que fue difícil para ella ser la hermana menor de la cantante.